El Real Madrid sigue cayendo 1-0 con el Valencia, en un duelo en el que ha quedado demostrado que los merengues deberán hacer mucho más de lo esperado si se quieren llevar los tres puntos, ya que los anfitriones juegan con '12'.
"Empezamos un nuevo reto con mucha ilusión. Partido exigente contra un equipo que cambió de entrenador y siempre nos ha costado. Queremos empezar bien el año y este partido es importante, un reto. El equipo está bien y el descanso ha venido bien porque todos han vuelto motivados y en buena forma", expresó un Carlo Ancelotti en la previa que olvidó al estamento arbitral.
El primer tiempo ya contó una exhibición de César Soto Grado, quien tiene prontuario contra el club blanco y su actuación en los primeros 45 minutos fue para el olvido.
Sin embargo, lo del segundo tiempo fue de escándalo, lo que ha hecho estallar a todos los aficionados madridistas.
Sin repetir el penalti
La polémica de la noche llegó después de que Jude Bellingham ejecutara un penalti cometido sobre Kylian Mbappé.
El remate del inglés se estrelló en el palo, pero las imágenes televisivas demostraron claramente que Stole Dimitrievski no estaba pisando la línea.
Ante esta irregularidad, César Soto Grado y los colegiados del VAR decidieron hacer la vista gorda, por lo que no repitieron el penalti, privando a los merengues de tener una nueva oportunidad desde el punto de penalti.
Esto demuestra que el Real Madrid si quiere ganar LaLiga deberá hacer mucho más que el resto, ya que la clara consigna de Luis Medina Cantalejo, encargado del Comité Técnico de Árbitros, es hacerle la vida imposible a la entidad madridista y a sus futbolistas.