El Real Madrid se ha estrenado en la edición 2024/2025 de la Liga de Campeones y ha defendido el título de vigente campeón de Europa contra el Stuttgart (3-1) con sufrimiento, aunque con orgullo y carácter, como es habitual.
A pesar de un mal inicio de partido, donde los germanos pudieron dar la sorpresa, el conjunto blanco se repuso y, ya en el segundo tiempo, las tornas cambiaron considerablemente. Antes, una soberbia actuación de Courtois evitó males mayores.
Mbappé abrió la lata después de una asistencia de Rodrygo. El Stuttgart no se rindió y acabó empatado, pero en los minutos finales apareció la cabeza de Rüdiger. Endrick se encargó, en la última jugada, de agrandar el resultado.
Antonio rompe el empate
El gol de Rüdiger fue uno de los más especiales y divertidos. En primer lugar, porque tuvo lugar en la portería que es secundada por el fondo sur. Por otro lado, porque fue el gol decisivo que rompía con el empate y, además, por la celebración tan jovial que se llevó a cabo.
Tras el tanto, Endrick y Militao, luego también Mbappé, ‘golpearon’ al zaguero germano, como acostubra el propio Rüdiger con sus compañeros cuando son ellos los que marcan un gol.
El propio Rüdiger lo comentó posteriormente en la zona mixta: “Ha sido un momento importante, marcar el gol en la portería del fondo sur”. Pero también anunció venganza en el futuro: “Si sigo marcando goles, pueden seguir golpeándome, no hay problema. Eso sí, si marcan ellos, se lo devolveré”.
El defensa alemán no pasa una y, fiel a la personalidad que tanto le caracteriza, promete seguir dando guerra y brindar al madridismo grandes momentos, como los vividos en Chamartín este martes.