Es posiblemente la frase más repetida por todo el madridismo. Equipo, afición y directiva saben que es un momento clave de la temporada, así que cuando llega febrero solo queda apretar los dientes y demostrar lo que uno vale.
En el mes más corto del año, las condiciones han querido que se jueguen una gran cantidad de partidos. Hasta 8 a poder ser con tan solo un margen de tres días de descanso entre los duelos. Una auténtica barbaridad de solo planteárselo y que los pupilos de Ancelotti deberían solucionar con plenas garantías.
Ancelotti pone deberes a los suyos
En el caso del entrenador, la figura que más será analizada, no parece preocupar a la cúpula madridista, ya que confían en su metodología. La misma que les llevó a levantar un doblete la temporada pasada o en 2014 con la décima.
La afición solo podrá disfrutar de la mitad de los partidos en casa, ya que el resto son fuera. El clásico copero de ida frente al FC. Barcelona, el derbi liguero frente a los colchoneros, frente al colista, el Elche y el primero de todos estos contra el Valencia que acaba de destituir a su entrenador.
Tras estos encuentros, los demás son fuera. Habrá dos de Mundial de Clubes, visitar Mallorca, territorio hostil para Vinicius, dónde se recuerda un feo partido por parte del rival en el Bernabéu en la primera vuelta, o huesos duros como la revelación de la campaña, el Osasuna y el duelo de Champions con el Liverpool en Anfield.
Con la temporada en juego
Gran parte de la lucha por los títulos se define en estos próximos encuentros. De ellos dependerá seguir vivos dentro de unos meses en las tres competiciones. Desde este mismo miércoles, el equipo se pone en marcha para empezar a recortarle al Barça esos cinco puntos de ventaja que les sacan, jugando a un fútbol espantoso.
La réplica merengue no puede esperar y todo es cuestión de ponerse para sacar su mejor versión en cada partido. Ancelotti ya se lo ha pedido en más de una ocasión a los suyos esta temporada y estos siempre han acabado respondiendo.
De llevar el ritmo que se vio en el partido frente a la Real Sociedad, uno de los más completos de la temporada a pesar del empate, el madridismo puede estar tranquilo, porque los resultados llegarán tarde o temprano.