Son tiempos muy difíciles para ser antimadridista. Y si no, que se lo digan a Cristóbal Soria. El tertuliano de El Chiringuito ha vivido el peor año de su vida después de la temporada que se ha marcado el Real Madrid al haber ganado la Liga, la Champions y la Supercopa de España. Ha sido testigo de las grandes remontadas en la Copa de Europa en el Santiago Bernabéu que dieron la vuelta al mundo, ante el PSG, Chelsea y Manchester City.
Y es que Cristóbal Soria ha sido el talismán del madridismo desde que comenzó a salir en El Chiringuito. Sus famosas y virales frases como “Casimiro Titular” y Zizou entrenador” sirvieron de inspiración al jugador brasileño y al entrenador francés para ganarlo todo en el Real Madrid y convertirse en leyendas del club blanco. Cada vez que el ex delegado del Sevilla critica a un madridista, lo bendice para siempre.
Tras las frases de Casimiro titular y Zizou entrenador, el Madrid fue para arriba y ganó tres Champions de manera consecutiva. La bendición de Soria al francés y al brasileño quedó para siempre y él tuvo que esconderse de nuevo en la cueva.
La nueva bendición a Vinicius
No tuvo bastante Soria con bendecir a Casemiro y a Zidane, que también quiso hacer lo mismo con Vinicius. Los primeros años en el Real Madrid no fueron nada sencillos para el brasileño, y el tertuliano andaluz aprovechaba la mínima para meterse con un chaval que empezaba a jugar y competir en Europa.
Tras un partido del Real Madrid en el que Vinicius no estuvo nada acertado, Cristóbal Soria aprovechó en El Chiringuito para burlarse de él de la manera más ridícula: “Vengo vestido de Vinicius, que es triatleta, Pedrerol. Primero corre mucho, luego hace bicicletas y después nada.”
Después de una temporada 21/22 en la que Vinicius se ha consagrado como una estrella mundial y como uno de los mejores futbolistas del mundo, Soria ha tenido que tragarse una vez más sus palabras y quedar de nuevo retratado ante otro futbolista del Real Madrid. Desde luego, Soria se ha convertido en el amuleto de la suerte del madridismo.