Terminaba el partido en Stamford Bridge y eran muchas las reacciones que dejaba el encuentro del Real Madrid en Londres. Aunque un opinión generalizada con el paso de los minutos, era el feo gesto que tuvo Karim Benzema con su propio entrenador.
El enfado de Karim Benzema
Este entendía que debería haber seguido más tiempo sobre el verde y se dirigí de malas maneras a un Ancelotti al que tampoco le gustaba su posado. El francés deseaba jugar más minutos, aunque visto su partido, este no logró tener su noche.
Fallón, algo desaparecido y sin apenas contactar con el balón, este se iba de vacío en una de aquellas veladas para olvidar. Cuando la tablilla auxiliar del cuarto árbitro mostraba su dorsal, este se iba con desgana camino al banquillo y ese gesto, posiblemente enfadó a muchos.
Uno que lo tuvo en cuenta fue Pedrerol, quién advirtió al delantero, con que no tenía motivos para quejarse. El trato con Carletto ha sido siempre excelente y el entrenador muchas veces ha sido quién se ha tenido que adaptar a él. Por ello, esas protestas airosas no tenían demasiado sentido.
La reprimenda de Josep Pedrerol
El presentador de “El Chiringuito” le recomendaba que se moderase y que aquel no era momento para reprochar tal decisión. Posiblemente, el club blanco pasa por uno de los momentos más decisivos de su campaña, y por ello, necesitan tener enchufados a todos sus jugadores.
Benzema debería entender mejor que nadie, que en una plantilla dónde juego 23 hombres disponibles, el que sale siempre es para darlo todo. Por ello, no se entiende ese malestar. Hoy se conocía el avance de su renovación y parece que el atacante se quedará como mínimo, una temporada más.
Dicha decisión viene en parte anunciada para tapar todo tipo de rumores y mal entendidos que no venían a cuento. Por ello, parece que el enfado de Benzema se quedaba en el juego, y debería entenderse como un lance del juego. Veremos qué ocurre en el siguiente partido.