Las reacciones tras la conquista del Mundial de Argentina están siendo de lo más variopintas. Algunas de ellas, como no podía ser de otra forma, van en contra del madridismo.
El encargado de hacer tales memeces, no podía ser otro que Cristóbal Soria y su habitual oportunismo. Este andaluz parece no tener fin en su desdicha por atacar continuamente al Real Madrid. Lo último que hacía era publicar una fotografía en sus redes sociales, con la que mandaba un mensaje de lo más bochornoso posible.
Cristóbal Soria más oportunista que nunca
Este aprovechaba el último triunfo de Messi, para tratar de ridiculizar a Cristiano Ronaldo. Ambos llevaban el mismo número de Mundiales (5), aunque el argentino ya puede decir que tiene el suyo particular. El astro luso se tuvo que conformar quedándose en cuartos de final frente al cuarto clasificado, Marruecos.
Aunque por si no fuera poco el tertuliano de “El Chiringuito” también la tomaba con Edu Aguirre, íntimo amigo de Cristiano y compañero de Soria en el plató del programa de Pedrerol. Aunque a decir verdad, esas criticas ya no le afectan a nadie. Su infinito cachondeo es algo a lo que ya estamos acostumbrados y parece que se le acaban las ideas.
Que Cristiano Ronaldo posiblemente ya no cuente con la posibilidad de conquistar un Mundial en su palmarés, es una realidad. Pero el mayor de los ejemplos es seguir trabajando en silencio. Fernando Santos llegó a prescindir de él en el once titular desde el duelo de octavos. Una decisión algo polémica y complicada que no entendieron muchos.
Las diferencias entre uno y otro
Si analizamos también sus caminos en el campeonato, veremos la dificultad de unos y otros. Por no hablar de los favores arbitrales que le concedieron a la albiceleste. A Soria deberían enseñarle qué es lo que hay que hacer y lo que no. Cristiano posiblemente no necesite tanto ese trofeo como si que lo desea Messi.
El luso, seguirá siendo considerado una estrella mundial y también le podría preguntar al argentino cuántas Champions tiene en los últimos años, porque los números son evidentes. No vale despertar tarde. Soria se agarra a un clavo ardiente, porque también lo vimos sufrir y de qué manera con Kylian Mbappé.
Un jugador que posiblemente acabe firmando de blanco en poco tiempo. El madridismo nunca ha dicho su última palabra y menos en un caso como estos: a títulos no le gana nadie. A la vista están sus vitrinas.