La discusión en el mundo del fútbol sobre el racismo se ha situado en el centro mediático. Las palabras de Pedro Bravo, tertuliano en El Chiringuito, hacia el jugador brasileño del Real Madrid, Vinicius Junior, han levantado ampollas. Ahora Juanma Rodríguez ha dejado retratado a otro integrante del equipo de Josep Pedrerol, Kike Mateu, reconocido hincha del Athletic de Bilbao.
En el día de ayer Mateu criticó duramente a Vini por básicamente dibujar una realidad en España que en realidad no existe, según apuntó Mateu. Estas declaraciones chocan con otras que hizo en el año 2020 sobre el racismo, reconociendo abiertamente los problemas que hay en nuestro país en torno a este tema. Por aquel entonces el tertuliano dijo: "Año 2020 y que tengamos todavía problemas con el racismo. Inconcebible", expresaba a través de su cuenta de Twitter.
Como viene siendo habitual, los tertulianos de El Chiringuito también tienen una gran actividad en Twitter para poder mostrar su opiniones de los temas que luego se tratarán en el programa, una fórmula que provoca que antes de que se enciendan las luces del plató ya haya pique entre los participantes de la noche de Pedrerol. Y ahí que fue Mateu a mojarse por el tema de Vinicius Junior.
Del brasileño dijo: "Alguien le ha debido intoxicar la cabeza a Vini para convencerle de que en España hay racismo y demás bondades contra su persona. Es evidente que lo que pasa con él es, cualquier cosa, menos racismo. A ver si alguien se lo explica que es mentira. El 99% somos gente normal", explicaba en un tuit el vasco.
Juanma Rodríguez solo actuó como altavoz, sin realizar ningún juicio sobre las palabras de Mateu, básicamente, se intuye, para que este quedara retratado por sí mismo. Y así fue, la red social no tardó en reaccionar a través de sus seguidores que criticaron duramente la postura de Mateu. Unas palabras cuanto menos desafortunadas que demuestran como muchos de los actores periodísticos que participan en los debate más populares tienen que revisar al menos su mensaje.
Sorprende sin embargo que cuando se trata de jugadores del Real Madrid no parece que salgan en lucha contra el racismo, más bien todo lo contrario, siguen cargando contra el agredido. Pasa que la hemeroteca en ocasiones traiciona a sus protagonistas, tal y como le ha ocurrido a Mateu en esta ocasión en la que no se entiende por qué critica la posición del futbolista del Real Madrid en lugar de condenar los comentarios de su compañero Pedro Bravo y de otros personajes que se han ido de la lengua estos días.
El problema del racismo en España sigue estando presente y quizá el fútbol sea uno de los medios en los que más se demuestra. La rivalidad y el forofismo sumado a un debate mediático a veces irracional provocan este tipo de hechos lamentables que habría que erradicar de forma inmediata del deporte rey. La responsabilidad de los medios, a la hora de contratar a personas así, debería ser más controlada pues tal y como se ha visto en esta ocasión, no todo el mundo está capacitado para dar sus opiniones ya que chocan con los valores de una sociedad que quiere dejar atrás este tipo de comportamientos inadmisibles.