Que Juanma Rodríguez es un apasionado del Real Madrid es algo que todos los aficionados a El Chiringuito y a Libertad Digital sabrán reconocer rápidamente. Que es un tipo humilde y le gusta la gente trabajadora que va ganándose los méritos que va logrando, tampoco es algo nuevo. No es nuevo que Juanma Rodríguez proteja a los futbolistas de perfil bajo, esos que no buscan el primer plano de la foto cuando se levanta un título.
Esos que no aparecen en los diarios deportivos por el último comentario que han dicho sobre esto o sobre lo otro. Juanma Rodríguez en un tono parecido habla de la misma forma sobre Toni Kroos, uno de los futbolistas a los que más admiras o eso da a entender el último texto publicado en el medio en el que escribe libertad digital. Hacia el alemán solo tiene buenas palabras y parece que Juanma Rodríguez quiera a Toni Kroos para que sea el marido de sus hijas.
Pero el tertuliano hace una descripción que no encaja del todo con lo que ha ido demostrando a largo de su carrera periodística, muchos saben que Rodríguez fue uno de los máximos defensores de José Mourinho en su paso por el Real Madrid. Un entrenador que al contrario de lo que dice de Toni Kroos en su texto, no guarda la mismas características que el futbolista alemán, pues si Toni Kroos es un jugador al que le gusta mantener su vida privada en el ámbito más personal. José Mourinho entra dentro de tu perfil salvo que el portugués es de esos que siempre busca el protagonismo tanto en los partidos como en las ruedas de prensa.
Pero aparte de Mou, las palabras de Rodríguez definen de una forma bastante objetiva cómo es el futbolista alemán, a quien algún periodista lo ha apodado como Iceman (hombre de hielo), un ejemplo perfecto de la idea que tenemos en España del perfil alemán: tipo serio, trabajador, muy responsable y con sobre todo algo seco.
Pero el francotirador no por eso deja de ser un jugador duro y contundente, tanto en su juego de ataque como en su juego defensivo, con un jugador que defiende al Real Madrid hasta la última consecuencia. Aunque es raro verlo discutiendo con algún compañero o con algún rival dentro de los márgenes y la cordialidad.
No por ello el alemán ha tenido que enfrentarse, a veces, a situaciones desagradables, como por ejemplo aquel periodista que se acercó tras el partido de la final de la Copa de Europa para preguntar a Kroos que si el Real Madrid era justo vencedor de la competición. Al parecer ya conocía conocía a ese periodista y le respondió de la forma más contundente.
El alemán sacó su lado más madridista y con un tono de elegancia respondió al periodista que, si iba a continuar con ese tipo de preguntas se acababa la entrevista. No hubo más preguntas. Y es que la elegancia y la caballerosidad de Toni Kroos siguió tras este incidente y no volvió a abrir más la polémica. Es por esto que a periodistas y aficionados como Juanma Rodríguez, la figura del alemán le inquieten tanto.
Toni tiene un perfil más típico de los años 80 que del prototipo de jugador que hay en la actualidad, quienes no paran de subir contenido a sus redes sociales y de anunciar a viva voz todas las cosas que llevan a cabo en su vida. Kroos ha sobrevivido a la modernidad, incluso las botas que lleva puestas son de las más clásicas. Sin extravagancias ni fórmulas secretas, así es Toni, un futbolista en peligro de extinción.