Fracaso, desastre, decepción, humillación, mazazo. Las sensaciones que dejó ayer el FC. Barcelona fueron un poema. El equipo se hundió contra el noveno equipo de la Bundesliga y ya suma una nueva crisis en una temporada que se les está haciendo muy larga.
Ni la Liga, Champions, Copa del Rey, Supercopa y ahora la Europa League. De vacío en un año estrepitosamente malo. La famosa “xavineta” no ha dado más tregua para un equipo que juega sin alma, sin rumbo y su identidad se desmorona por momentos.
En “El Chiringuito”, Josep Pedrerol, estalló. El presentador sacó su vena culé y le puso nombre a la terrible humillación del Barça. Criticó toda clase de argumento "vacío" sobre la eliminación de su equipo y atizó a todos aquellos que consideraban que "no pasaba nada".
El periodista estaba muy decepcionado y resignado con la actuación de su equipo. El presentador perdía la fe en el equipo y reconocía que el aficionado culé, ya no sabe dónde cogerse.
El director del programa, estaba perdiendo los papeles, en un momento, que quizá llegó a convertirse en el minuto de más audiencia del programa. Ver a los azulgranas así, es carne de mofa. Los merengues disfrutaban viendo como el FC Barcelona se desmoronaba.
Pedrerol destapa todas las vergüenzas del FC Barcelona
Su discurso fue tan duro que dejó enmudecido al plató con los demás tertulianos. Su denuncia fue tan acertada, que no dejó ni broncas para los seguidores habituales de la bancada del Real Madrid. Alfredo Duro o Balboa, miraban perplejos a su compañero a la expectativa de que acabara. El vídeo es aterrador:
“El culé se va a la cama cabreado”. “Es un fracaso”. “No os creáis la propaganda culé”. “El barco de Xavi me da igual. El barco es de los aficionados del Barça”. “Hoy hay qué hablar de qué pasa: ¿Xavi es muy bueno? ¿Se quedará Dembelé? “Al Barça le quedaba la Europa League y la ha tirado”.
Reflexiones como estas, salieron de la boca de Josep Pedrerol. Hacía tiempo que no se le veía tan afectado por la debacle culé y ayer el presentador se desató con su vena azulgrana para despojarse del ridículo que había hecho su equipo.
El otro día ya criticó la actitud de Xavi en la previa al partido, por desprestigiar el ADN del Real Madrid. Ayer le puso los puntos sobre las ies.
En su agonía, pidiendo un clamor al cielo, hasta se acordó del trasvase que le ocurrió al conjunto culé con el cambio de entrenadores. Llegó a recordar que, Sergi Barjuan, el técnico interino en la transición azulgrana de Koeman a Xavi, había mejorado los números actuales entre la distancia de merengues y catalanes.
Pedrerol no quiere subirse a ningún barco
Pocas veces había sido tan claro y directo con su sentimiento futbolístico. Hablaba en primera persona: “Somos el Barça”. Al ser el moderador del espacio futbolístico, estaba acostumbrado a mantener una postura más alejada, con una actitud más destemplada y desenfrenada.
Además, al frenarse un poco su enfado, con varias intervenciones sin sentido de Jota Jordi, el presentador catalán pidió perdón a la audiencia y a sus amigos culés, por si alguien se habría sentido afectado. Algo inédito, que seguro que dejó descolocado a más de uno.
Los colaboradores y tertulianos de “El Chiringuito” sí que suelen mostrar sus colores y defender abiertamente a su equipo. Ya estamos acostumbrados a ver el espectáculo de Roncero, Juanma Rodríguez o Alfredo Duro. Frente al show que tratan de aportar los de la bancada culé, como Jota Jordi, D’Alessandro o Cristóbal Soria.
Pan comido para el Real Madrid
Para el aficionado madridista, lo de ayer fue jauja. En Planeta Real Madrid, hemos querido darle voz a uno de los grandes desastres del eterno rival. La imagen mostrada en el verde, queda lejos de un rival de altura para el equipo de Ancelotti, que anda clasificado para las semifinales de Champions, rumbo a la catorceava.
El equipo azulgrana va en dirección contraria, ahora ya, sin esquivar cualquier tipo de desastre. Parece que Xavi no ha sabido dar con la tecla y se deberán acostumbrar a jugar solo los fines de semana.
Lo de jugar los días laborables, el auténtico día de trabajador dónde los madridistas se ponen el traje, solo es para los mejores y valientes.
De esta forma el FC Barcelona se despedía de una noche “horribilis” y decía adiós a la temporada, sino lo había hecho ya. En el campo, la afición local, ni acudió. La noticia fue la contraria: el despliegue de los aficionados del club alemán arrasó el Camp Nou.
Hasta el lugar habitual de celebración de los aficionados del Barça, Canaletes, cuando celebraban títulos -ahora ya no lo hacen-, estaba abarrotado de hinchas del Eintracht.