Después de meses de tertulias, de debates, de giros dramáticos, de declaraciones y de una interminable historia, finalmente, Kylian Mbappé no jugará en el Real Madrid y se quedará en el PSG. El jugador francés ha renovado su contrato con los parisinos hasta 2025 y ha vuelto a dejar escapar el tren del trece veces campeón de Europa.
Y es que no es la primera vez que Mbappé rechaza al conjunto blanco. En el verano de 2017, pudo recalar en Chamartín cuando militaba en las filas del Mónaco, pero acabó decantándose por el PSG. Cinco años después y tras haber dado su palabra al Real Madrid de que se uniría a ellos la próxima temporada, ha acabado eligiendo, de nuevo, el dinero de Qatar.
Kylian Mbappé no debería volver a tener la oportunidad de jugar en el Santiago Bernabéu. Ha traicionado al club y a toda una afición que le esperaba y confiaba en él. Ha preferido la jaula de oro de París en lugar de la gloria eterna en el Real Madrid. Ha hecho un feo histórico, sin precedentes.
Pedrerol contaba anoche toda la historia del caso Mbappé
En El Chiringuito especial de anoche, Josep Pedrerol explicaba, con todo lujo de detalles, la historia completa del no fichaje de el de Bondy por el equipo madridista. Fue el primero que dijo que las cosas se estaban torciendo cuando todo el mundo daba por hecho que vendría.
“Primero fue el ‘tranquilo’. Después el ‘Tic Tac’, que aguantó hasta el 31 de agosto. El Madrid ofreció 140, 160, 180 y hasta 200 kilos. Después de eso dijimos que iba a empezar una carrera que no sabíamos quién la iba a ganar. Cuando en septiembre se llega a un acuerdo total, yo digo que Mbappé jugará en el Real Madrid. Me fiaba de la palabra de Mbappé”, aseguraba Pedrerol.
“Florentino hablaba por Skype con Mbappé cada quince días. Si llegan a un acuerdo de todo, de los años, del dinero, le promete que fichará por el Real Madrid y hablan cada quince días de todo, yo digo, como le decía Mbappé a Florentino, que jugará en el Real Madrid. Todos creímos a Mbappé. Cuando vi que la cosa se tambaleaba, lo dije. Se estaba complicando la cosa. No contestaba ni las llamadas. Ahí sospechábamos y temíamos por la operación”, señalaba.