Con eliminación de España se daba caza por fin a los auténticos palmeros. Estos terminaban su aventura a la vera de Luis Enrique, habiendo hecho el ridículo una vez más.
José Luis Sánchez les ponía el freno y les hacía pagar sus barbaridades. Este tiró de hemeroteca para atacar dónde más les dolía. El periodista de “Jugones”, repescaba un tweet de Jota Jordi, el presidente de club de fans de Luis Enrique, el día en que España goleó a Costa Rica en su partido inaugural en esta Copa del Mundo.
Jota Jordi, el más palmero de todos
El catalán presumía entonces del ADN culé de aquel día con muchos barcelonistas en el once. Así decía su mensaje: “Otra vez la España con el ADN Barça. Otra vez una España ganadora.”
Ahí empezó la brecha de la polarización y el tertuliano atacó a los madridistas con el argumento más simplista. Este quiso presumir y recordar aquel equipo que se coronó en Sudáfrica, dónde también había un buen grupo culé.
Pero en ninguna de las veces, fue mérito culé. Posiblemente la situación de ayer y la de hace 12 años, muestran la sintomatología de un club de forma evidente. La base de esta y aquella selección, podría considerarse de azulgrana.
A efectos prácticos, nada más contando el número de jugadores que había, ordenados por Vicente del Bosque, todo era diferente. Había unidad, liderazgo, heterogeneidad de cualidades. Existían los ausentes líderes de esta ocasión.
Lección aprendida para Jota Jordi
Pero el fútbol no tiene memoria, y la prueba se mide con esta experiencia en Qatar. La sensación que transmitieron en su equipo (eliminados de la máxima competición europea, y con lo justo en Liga) era la misma que aportaron en Qatar: juego en horizontal, poca profundidad y carácter para sacar adelante los partidos.
Si el seleccionador más antimadridista quería presumir de ello, se equivocaba trayendo a un grupo de jugadores echados a perder en la mediocridad. Su fútbol no era ni de lejos brillante, y así se ha demostrado.
El mediocampo culé que se quiso imponer, no tenía suficientes recursos. Un pivote ahogado por su edad, un interior desaparecido en la mayoría de duelos y el más destacado de los tres, era el primero que sentaba el entrenador.
El lateral, solo aguantaba varias carreras y arriba en ataque, no tenían el acierto que justificaba el mal momento de su equipo.
El golpe definitivo de José Luis Sánchez
Resurgió entonces José Luis Sánchez para darle una lección a Jota Jordi. Este aprovechó aquel bochornoso mensaje para contestarle su crónica de una muerte anunciada: “La eliminación será huérfana...¿ADN?”.
Veremos qué rumbo toma ahora el combinado nacional, pero se deberían respetar las prioridades colectivas y no individuales. Los favores y enchufismos, no son bienvenidos cuando te llaman a filas y te juegas el pescuezo para rendir de forma decente.
No hay justificación que valga. ¿Dónde están ahora los palmeros?¿Importará ahora el barcelonismo?