El Real Madrid arañó ayer un empate en Varsovia ante el Shakthar Donetsk en el último minuto del partido tras un pase genial de Toni Kroos y posterior remate de Antonio Rüdiger. Pese a ello las críticas eran de esperar pues los de Ancelotti no mostraron ni de lejos su mejor versión. No sorprendió el análisis de partido que hizo Jorge D'Alessandro en El Chiringuito y fue muy crítico quizá el día que más desde que arrancó este nuevo curso.
Para el técnico argentino el Real Madrid rozó el ridículo en Varsovia pero no señaló a Carlo Ancelotti sino a los jugadores quienes fueron los que no estuvieron finos. Apuntó sobre todo a los que partieron de inicio, y no tuvo buenas palabras ni para Rodrygo Goes ni para Vinicius. Es evidente que Jorge D'Alessandro pasaba la actuación de Eden Hazard por alto debido a que no sorprendió que no hiciera nada. Aunque de los que sí esperaba algo no lo mostraron.
Duras declaraciones a pesar de haber conseguido el empate que le pone con los dos pies en octavos de final de la Champions League. Eso sí, los de Ancelotti tendrán que jugarse la primera plaza del grupo pues es lo único que le queda al Real Madrid por conseguir y tiene dos jornadas por delante. Poco se habló sin embargo de la intensidad y las ganas de ganar que mostró el Real Madrid.
Un partido que quedó bloqueado en el inicio de la segunda parte tras el gol del equipo ucraniano, pero que ya en primera el Madrid mostró argumentos como para llevarse un resultado más positivo al descanso. Con el contratiempo del primer gol, Ancelotti movió el banquillo y antes del minuto 66 ya había realizado 5 cambios. Sustituciones que D'Alessandro aplaudía debido a que el Real Madrid no parecía capaz de desbloquear el resultado en contra.
Con el gol de Rüdiger, dice Jorge D'Alessandro que el equipo de Ancelotti salvó el ridículo. "El portero lo salvó del ridículo", decía el tertuliano que añadía que el equipo fue espantoso. Una sensación que también le quedó al entrenador italiano del Real Madrid aunque Carletto no utilizó esos términos, pero no pudo evitar reconocer que el equipo no estuvo bien.
Sin embargo, Carlo Ancelotti puso en valor que el equipo nunca se rinde y eso fue lo que le hizo sacar algo de Varsovia. No perder la cara al partido es una de las premisas del fútbol, más incluso en la Copa de Europa donde los rivales a los que hay que enfrentarse suelen estar plagados de talento. El equipo merengue insistió durante todo el partido, pese a ello no crearon ninguna jugada de verdadero peligro hasta el primer remate de Rüdiger nada más entrar en el tiempo de descuento. Pese a todo, el Madrid no haciendo un partido brillante puso sangre, sudor y lágrimas para rescatar un punto y ser el primer equipo español que alcanza los octavos de final. Objetivo cumplido.