Lo de Cristóbal Soria no tiene remedio. Parece que el tertuliano empieza a ver la luz, tal y como se lo dijo su compañero Tomás Roncero. Al andaluz lo vimos algo alicaído en el programa de “El Chiringuito” de anoche. La jornada había dejado mucho que desear y el exceso protagonismo de los árbitros manchó los ratos de buen fútbol. Pero si por algo gusta el programa que presenta Pedrerol es por la naturalidad y cercanía que transmiten sus colaboradores.
Estos a pesar de montar numeroso jaleo, son seres muy queridos y respetados por la mayoría de la audiencia, a quién se deben. A pesar de que cada uno tenga su opinión o su equipo, lo que realmente importa es el fútbol. Así que Soria lo tenía claro: Él tampoco veía penalti de Asensio en ningún lado. Una posición natural, sin intención de cortar la jugada y con la única premisa de defender ese escudo en el pecho.
Los valores y el sentimiento de Cristóbal Soria eran contradictorios. Este confesó que en su interior, escocía un fuerte debate ya que lo que se vio en el Bernabéu no era algo normal. Pero si ya había la alarma puesta a todo esto, más rotundo parece que hasta el más antimadridista, reconocía que no existía una mano en esa jugada.
Soria quedó retratado
Le costó reconocerlo, se sonrojó y les pómulos le quedaron pequeños con la cabeza gacha. Empezó con la boca pequeña, ya que no se lo estaba creyendo ni él. Era algo que nunca había ocurrido y se acabó llevando hasta el aplauso irónico de sus compañeros. En el fútbol prima jugar, el espectáculo y los goles. Cuando hay algo que se aleja de todo esto, es mala señal.
El aficionado paga su entrada para emocionarse con lo que ocurre sobre el verde y no al contrario. Parece que los éxitos merengues contagian a más de uno y el chaquetero de Soria, acostumbrado a verde derrotado esta temporada con la mala imagen de su Sevilla, los cantos de sirena madridista han llegado a sus oídos en los que ha quedado atrapado.
Era algo que prácticamente nadie esperaba. Pero que la respuesta frente a esto sea tan generalizada, implica pensar numerosas cosas: ¿Qué será lo siguiente? A Melero López e Iglesias Villanueva, les deberían castigar a la nevera con varios partidos. Veremos cómo afectan la pérdida de esos dos puntos a lo largo de la temporada. Una de las más ajustadas que se recuerdan.
Marco Asensio también se mojó
Hasta los propios futbolistas blancos se quisieron sumar a la protesta. Es algo que no acostumbran a hacer, pero vista la polémica, algunos no les quedó otro remedio para quejarse. De los primeros en hacerlo fue Marco Asensio, que mandó un mensaje contundente acompañada de la revisión de su penalti: “Definición de no mano que nos explican a principio de temporada...Increíble que hoy sí...”.
Esto decía el balear tras el partido y esa indignación fue la de Soria, la de Juanma Rodríguez y la de muchos otros más. Veremos si el discurso de Cristóbal Soria se aguanta más tiempo así. El Real Madrid es el equipo de todos. En “El Chiringuito” hay una gran escuela de madridismo. Estará siempre muy bien acompañado.