La locura que se está viviendo con Vinicius no es ni medio normal. Verdadera fiebre la que ocurre cuando el jugador conecta con el balón y empieza a hacer filigranas de las suyas.
Así lo presagiaba D’Alessandro, analista y tertuliano de “El Chiringuito” hace casi dos años y su compañero en el programa, Rafa Guerrero, no le quitaba el mérito de haberlo avistado desde hace tanto tiempo.
El parón de selecciones ha servido para ver a la selección carioca en su mejor versión. La conexión de los brasileños en un mismo equipo tan solo hace delicias al verlos jugar. Equilibrio, impresionismo y numeroso impacto cuando están juntos sobre un terreno de juego. Verlos jugar en el mundial será una tarea muy interesante.
Vinicius se ha convertido en la referencia del fútbol moderno
Al brasileño del Real Madrid, no le faltan elogios y si ya era un auténtico crack en el Bernabéu, también lo es ahora con Tite en la selección. Este le ha sabido encontrar su sitio junto a Neymar para formar una dupla arriba muy temida.
Podríamos estar hablando que el madridista es uno de los mejores del mundo actualmente y así se certifica en su valor de mercado que no ha parado de crecer. Este ya oscila en los 120 millones y nadie se extraña al verlo.
Verticalidad, descaro y desparpajo con el balón. No se arruga con nadie ni contra nadie, y con una sonrisa incorporada es la nueva alegría del fútbol.
Son muchos los elogios que ha recibido y lejos quedan ya las polémicas en las que le acusaban de provocador por hacer tal cosa u otra sobre un terreno de juego. El futbolista se limita a jugar bien al fútbol.
Vinicius es el nuevo héroe del madridismo
No esconde ningún secreto y con ánimos de liderar y levantar al público de los estadios dónde juega, se atreve con todo. Las noches en los debates de “El Chiringuito” se ha hablado en muchas ocasiones de su proyección. El analista siempre ha estado muy pendiente de su juego y no es para menos, porque es capaz de hacer una cosa distinta a cada rato.
No defrauda ni engaña a nadie. Juega tal y como siempre le han enseñado. Cualquier enamorado del fútbol debe reconocer que su fútbol es auténtico. A día de hoy es uno de los deportistas más mejorados en el menor tiempo posible. Con 18 años ya llegó a tirar del carro, ante la falta de un líder que lo hiciese.
Ahora se ha convertido en un referente a tocateja. Todos creen en sus capacidades y nadie duda de su mágico talento. Con Ancelotti ha demostrado tener esas características para triunfar en el Real Madrid.
La gente paga entradas tan solo para verle jugar y su pretensión es la de devolver la ilusión a esa parroquia que tanto le ha apoyado y animado. La comunión es total y nadie es capaz de derribar esa unión tan especial que se ha generado. D’Alessandro entonces ya tenía razón y solo fueron pocos los fieles que le creyeron.
Aunque nadie podía imaginarse que esa devoción y deleite iba a ser tan fuerte y certera. Todo pasa por algo y parece que Vinicius le ha tocado la varita mágica.