La historia del fútbol ha hecho mucho daño. Más si cabe, si la rivalidad ha sido entre FC. Barcelona y Real Madrid. El último en abrir este contundente debate ha sido el streamer Vihi RM quién ha conseguido opiniones de todo tipo, a cada cuál más variopinta.
Su tweet no pasó desapercibido entre los más de 212.700 seguidores que acumula en la red social de la que colgó el polémico mensaje. Yihi RM, así se hace llamar en redes, preguntó abiertamente sobre la posibilidad de calificar a cuatro de los centrales más importantes de los últimos tiempos que han residido en uno y otro equipo. Les pidió a sus seguidores que ordenaran a: Ramos, Pepe, Piqué y Puyol.
Ordenad a Pepe, Ramos, Piqué y Puyol. Dando argumentos. Va.
— Yihi (@YihiRM) June 28, 2022
En pocos minutos, acumuló numerosos mensajes que recordaron aquellos tiempos dónde la rivalidad entre los dos equipos era crispante. La tensión que hay ahora, quizá se ha rebajado un poco, más allá de los principales problemas institucionales que atraviesa el equipo azulgrana tanto: deportivo como económicamente. El conjunto madridista está siendo fuertemente superior en estos años y su rivalidad no le alcanza a su rival ni para acercarse a la suela de sus zapatos.
¿Quién fue el mejor de todos?
Volviendo al debate, individualmente podríamos dar una pincelada de cada uno de ellos. Su calidad, importancia en el club y rendimiento han sido más que suficientes como para hablar largo y tendido sobre ellos. Entre todos formaron dos parejas de centrales, que podrían considerarse de las mejores en el mundo del fútbol.
Tres españoles y un portugués, han marcado el estilo de juego de la última década de sus clubes. Hace años que ya no juegan juntos o ni se han llegado a enfrentar de nuevo. De los cuatro nombres, solo permanece uno intacto: Gerard Piqué.
El catalán ultima sus días como jugador de primer nivel y los otros tres: su compañero Puyol ya está retirado, y los exmadridistas, Ramos juega en el PSG desde hace una temporada tras no renovar su contrato como madridista y Pepe volvió a su querido Oporto, el club que le vio nacer.
¿Tú a quién escogerías como el vencedor? Por méritos propios, parece que hay un claro vencedor y aunque el debate pueda estar muy ajustado, merece ganarse el puesto el camero.
De Sergio Ramos solo hay uno
La papeleta del andaluz, nunca ha sido sencilla. Un jugador que llegó a la entidad madridista muy joven, con hambre de títulos y ese perfil de jugador joven formado para ser un lateral ofensivo, con una férrea capacidad defensiva.
Es de admirar todo lo conseguido por Ramos. Vivió numerosos años en el Bernabéu, primero como lateral para luego vivir una reconversión a central.
Muy serio en todas sus facetas: defendía, ayudaba, sacaba el balón con criterio, iba fuerte al corte, contundente…lo tenía todo para triunfar. Todo el mundo recuerda su melena rubia, que poco a poco se fue reconvirtiendo en ese peinado más perfilado y maduro.
Imponía miedo a sus rivales. Mejor no te cruzaras con él, sino querrías tener un mal día.
Era capaz de arruinarte todo tu potencial y sacarte del partido en pocos minutos. Su alma de delantero, una posición que ya probó de niño le auguró con numerosos goles a pesar de ser defensor. Recordemos todavía el tanto de la décima que nos hizo soñar y creer que el Real Madrid es un equipo que lucha hasta el final.
Un jugador incansable que lo ganó todo con su club. Su ambición por ganar, incluso, le hizo buscarse nuevos retos fuera de casa, para seguir escribiendo su historia, aunque la propuesta no le haya salido del todo bien. Lejos del Bernabéu hace mucho frío.
Pepe, un jugador constante
El siguiente madridista, el portugués, siempre consiguió anular a cualquiera. A pesar de tener un carácter complicado, el luso vivió muchas temporadas en el once blanco.
Fue el escudero de Casillas durante mucho tiempo. Su conexión con Ramos era idílica y mientras uno tenía más técnica, el otro tenía más táctica. La combinación ideal.
A la vista están los títulos que ganaron, frente a la otra pareja de centrales. Su potencial estaba muy superior que los dos de Barcelona. Puyol y Piqué, era una pareja algo inestable.
La pareja culé muy por debajo de lo que ofreció la madridista
El compromiso del primero, no encajaba con las imprudencias del segundo. Aunque ambos conectaban bastante bien, había uno que trabajaba más que el otro. Uno mejoraba al otro.
Desde que se retiró Puyol, su pareja no funcionó ni medio bien y así se ha visto retratado, temporada tras temporada. Los cuatro nos hicieron disfrutar mucho tiempo. La rivalidad por ver quién podía ser el mejor, impresionaba a cualquiera.
Convivieron en una época, en la que los dos equipos futbolísticamente eran imparables. Daba miedo ver esos clásicos. Era un auténtico espectáculo para cualquier aficionado.