Si todavía no conoces el testimonio de Valeria, mereces escuchar a la pequeña madridista como vive su pasión con su equipo. Ella vive en París, pero siempre ha vivido muy de cerca todos los éxitos blancos.
Presente en la remontada ante el City en el Bernabéu vive los goles con la máxima emoción. Aquella noche fue la primera que pasó como madridista en el estadio. Menudo estreno el suyo.
Una madridista de cuna
Tan solo tiene 11 años, pero ya resume su relación con el equipo como una verdadera pasión. Para ella es lo mejor y siempre quiere lo mejor para su equipo, que ganen. Los goles los celebra con lágrimas en los ojos de la emoción que desprende cada tanto que anotan los jugadores.
Ha llegado a celebrar los goles tal y como lo hacen los jugadores sobre el verde. Con los puños en alto y apretando fuerte. Si hay algo que le apasiona como madridista es su grandeza.
Las redes sociales, han descubierto su testimonio y nos cuenta cómo vivió una de las remontadas de esta edición de la Champions. Es de las que prefiere no mirar cuando se chuta un penalti. Los nervios se apoderan de ella y prefiere imaginárselos en su cabeza.
Un sueño cumplido
Describe a Benzema como un jugador de otro nivel. Ella también futbolista, juega en uno de los equipos de fútbol base en París. Marca los goles como su ídolo, el francés y a pesar de llevar el “10” a la espalda, regatea y reparte el juego como Modric.
Su promesa por comprarse la camiseta del equipo, si el Real Madrid ganaba la Champions, la cumplió y ya la tiene consigo. Vivió la final de la Champions en Saint Denis, animando como la que más. Con la catorceava, cumplía su quinta final como aficionada. Confiada con que su equipo ganara, y lo hizo.
El Real Madrid tiene la facilidad de poder contar con todo tipo de aficionados. Pequeños y grandes disfrutan de la grandeza de este escudo a partes iguales. Una verdadera maravilla para la parroquia blanca.