En el último entrenamiento del Real Madrid, la plantilla de Carlo Ancelotti recibió la visita de una persona muy especial. Gareth Bale aprovechó la estancia del conjunto blanco en Los Ángeles para saludar a sus antiguos compañeros, con los que tantos títulos levantó en su época como madridista. El futbolista galés, que puso fin a su etapa de blanco después de nueve años, no se olvidó de su exequipo y se acercó al entrenamiento, demostrando que guarda con mucho cariño sus años en el Madrid, aunque no siempre fueran fáciles.
El capitán de la selección galesa fichó este verano por Los Ángeles Football Club, dando así por finalizada su andadura en el fútbol de élite. A pesar de que sus últimos años en Chamartín no fueron nada buenos, Gareth Bale ha sido fundamental para las conquistas de muchos títulos importantes que ha ganado el Real Madrid en los últimos años. Como madridista, ganó 19 títulos colectivos: 3 Ligas, 1 Copa del Rey, 3 Supercopas de España, 5 Ligas de Campeones, 3 Supercopas de Europa y 4 Mundiales de Clubes.
El gran gesto que tuvo Bale con sus compañeros acercándose al entrenamiento y saludándolos de forma tan cariñosa y amistosa, contrarresta con el de Cristiano Ronaldo. El portugués, que sigue en busca de un nuevo equipo con el que pueda competir en la Champions, ha coqueteado en las últimas semanas con el Atlético de Madrid, el gran rival por antonomasia de los blancos en la capital.
Dos gestos muy distintos
Cristiano Ronaldo es un jugador tan sumamente competitivo que no le importa en qué equipo jugar con tal de que vea una oportunidad de seguir compitiendo al máximo nivel. Ya el verano pasado, estuvo a punto de fichar por el Manchester City, el gran rival del United junto con el Liverpool.
Y este año, han salido muchísimas informaciones de que es posible que el máximo goleador histórico del Real Madrid acabe en las filas rojiblancas. No obstante, Enrique Cerezo confirmó hace escasamente unos días que la plantilla ya estaba cerrada y es imposible que el bicho juegue la temporada que viene en el Atlético de Madrid.
A pesar de las enormes críticas que recibió Gareth Bale por su falta de compromiso con el equipo merengue, se ha visto que le tiene mucho cariño a su exentrenador (a quien le dio un buen abrazo) y a sus antiguos compañeros. Un cariño, que no ha demostrado Cristiano desde que abandonó Chamartín en el verano de 2018.