La investiagación sobre el Caso Negreira sigue su curso, mientras tanto son muchos los que están sacando hechos del pasado que ahora ganan sentido tras conocerse la lamentable noticia del Fútbol Club Barcelona y Enríquez Negrerira.
Conflicto de intereses
Este es uno de los puntos clave para entender qué es lo que está pasando en LaLiga y entorno al Fútbol Club Barcelona. Hay tres casos fundamentales que en los últimos meses han acorralado en cierta manera al club catalán.
La primera fue la del famoso contrato entre la empresa de Gerard Piqué y Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, para llevarse la disputa de la Supercopa de España a Arabia Saudí, lejos de los aficionados españoles.
Evidentemente, el caso dejó unos cuanto millones en la Federación que celebró con muchas ganas exiliar uno de los títulos de la federación. Así las cosas el asunto no trascendió más ya que las comisiones no existieron.
El segundo caso
El segundo capítulo en esta serie de conflictos se dio este pasado verano cuando Roures, líder de Mediapro, que tiene los derechos de emisión de La Liga, hizo posible con su inyección económica que el Barça inscribiera a tiempo a varios fichajes.
Es decir, gracias a su aportación económica estimada en 100 millones de euros, el Barcelona pudo activar la última palanca que necesitaba para no caer en el ridículo. Algo que se ha discutido mucho y que se seguirá debatiendo.
El caso definitivo
El escándalo de los pagos a la empresa del hijo de Enríquez Negreira sitúa el hartazgo en un punto muy elevado. Todo está por resolver, pero parece que el Barcelona no actuó acorde a la ética deportiva que se le tiene que exigir a una entidad de su emvergadura.