La explosión de Vinicius con el Real Madrid ha dejado a más de uno con la boca abierta. El brasileño corrigió un par de detalles en su proyección y este, desde entonces, no ha parado de crecer.
Como un auténtico animal competitivo, su fútbol ha impresionado a más de uno y a día de hoy ya es considerado como uno de los mejores en el terreno de juego. Con una valoración de mercado cerca de los 120 millones, el futbolista es ya toda una institución en el Real Madrid.
La afición no se imagina un once sin él y su determinación u desparpajo ha convencido a pasos agigantados. Este ya es candidato a todo, incluso algunos ya le auguran el premio al Balón de Oro. La llegada de Ancelotti al banquillo blanco, le cambió su perspectiva de jugar.
Vinicius ha callado muchas bocas
Ahora ha pasado a ser una auténtica referencia y son muchos los compañeros que ya le tienen miedo y les cuesta un mundo, aguantar su ritmo. El tipo no ha dejado de trabajar en silencio durante todo el tiempo, y a pesar de las críticas este ha hecho siempre oídos sordos.
Fuerte, valiente y con ilusión así entiende el fútbol, al igual que los mejores brasileños de la historia. El atacante les ha callado la boca a más de uno, y la hemeroteca hacía su función nada más volver a hacer una clase magistral de buen fútbol en un clásico para recordar.
Las redes sacaban a la luz, un artículo firmado por la redacción del medio deportivo catalán, Sport, en el verano de 2017. Por aquel entonces, el carioca todavía no había ni llegado a Chamartín y muchos ya se reían del trabajo del club merengue por tirar la casa por la ventana con un auténtico desconocido.
La explosión de Vinicius no se hizo esperar
Entonces el mundo no conocía a Vinicius, un chaval jovencísimo de 17 años que ya se asomaba para llegar a Europa y demostrar su valía. El tiempo le ha dado la razón a Florentino, quién ha sido su ojo derecho durante todo este tiempo.
Esos 61 millones que se pagaron por el futbolista, y que tanto se reían en Barcelona, resulta que han salido demasiado baratos. Vinicius no es el primer caso que consigue tapar bocas. Lo mismo ocurrió con Modric y ahora está suciendo con Endrick.
Aunque lo que desconocen en el Camp Nou es que este club se viste por los pies y sabe perfectamente sus prioridades y que haceres: de ahí que sea uno de los equipos más grandes del mundo.