La continuidad de Marco Asensio en el primer equipo del Real Madrid está más discutida que nunca. A pesar de que durante gran parte de la temporada fue clave en el once inicial de Carlo Ancelotti, el partido de ida de los cuartos de final contra el Chelsea supuso un cambio radical en la forma de pensar del técnico transalpino.
El jugador balear está desaparecido del equipo titular, y apenas ha disfrutado de varios minutos en la sucesión de partidos importantes que ha tenido el Real Madrid durante esta semana. Solo contra Osasuna, cuando Ancelotti presentó un once con muchas rotaciones, Asensio fue uno de los elegidos para salir de inicio. Aun así, su discreto rendimiento en El Sadar a pesar del gol deja malparado al mallorquín, que está viviendo un declive horrible desde su desgraciada lesión de rodilla.
Los continuos rumores de su marcha del equipo al final de esta temporada podrían ser otra de las razones por las que su implicación en los partidos ha bajado: sabedores de que quizá no puedan contar con él de cara a la próxima temporada, han decidido dejar espacio a otros jugadores como Rodrygo Goes que está agarrando el ritmo competitivo con apariciones estelares.
En caso de que Marco Asensio no tenga sitio en el terreno de juego para el Real Madrid, el conjunto blanco ha pensado otro sitio en el que el balear podría destacar y traer nuevas glorias al conjunto blanco: los eSports. Es más que conocida la afición del jugador mallorquín por los deportes electrónicos y su buen desempeño en este nuevo deporte. Esta salida profesional para Marco Asensio permitiría que él y el Real Madrid siguieran vinculados por varios años.
El currículum de Asensio como jugador de eSports es brillante, con una buena representación del Real Madrid cuando la temporada se detuvo en el inicio de la pandemia por COVID-19. En ese lapso de tiempo sin fútbol, Ibai y LaLiga organizaron un torneo de FIFA 21 en el que participaron todos los clubes de Primera División salvo el FC Barcelona, que abandonó la competición sin previo aviso y provocando un cambio en la organización del torneo debido a cuestiones de patrocinio. A pesar de ser un torneo benéfico destinado a paliar las destructivas consecuencia de la COVID, el conjunto blaugrana rehusó de forma poco educada su participación. Una forma de proceder a la altura del club.
Marco Asensio fue la estrella de dicho torneo y llevó al Real Madrid a la final contra el Alavés, que disputó contra el jugador Aitor Ruibal. Con un desempeño estelar, Asensio estuvo intratable manejando al Real Madrid desde los mandos de una videoconsola y arrasando a los rivales que se encontraba, incluso dominando con soltura la final durante el partido contra el Alavés. Con esta actuación, el conjunto de Concha Espina podría haber encontrado la alternativa para que Marco Asensio triunfe finalmente vistiendo los colores del Real Madrid, aunque sea a través de un videojuego.