El brutal cisma producido en el seno de la eSeFútbol no ha afectado a las instituciones directamente implicadas, que aún así han decidido seguir adelante con un proyecto que parecía abocado al fracaso y a no continuar por la buena senda que se había iniciado bajo la dirección y control de jugadores y coaches expertos de FIFA, como Nacho Abella, Edu Castellano y Javier Villar.
Las sorprendentes bajas de estos nombres propios, sumadas a las de otros respetables jugadores de FIFA en nuestro país no han amedrentado a la RFEF, que decidió dar continuidad al proyecto de la eSeFútbol en su objetivo de lograr la clasificación para la FIFA eNations Cup.
Si bien este objetivo se ha logrado, molesta la falta de representación de jugadores que rechazan las prácticas oscurantistas y cuestionables métodos de actuación de la institución de 'Rubi', que no dudó en provocar la marcha de Neat, Villar, Abella o David Sánchez con el único propóstico de seguir su propia agenda antimadridista, que sin duda alguna también parece aplicar en los eSports.
Precisamente Abella y Villar, vinculados a Case Esports y DUX Gaming respectivamente, han pagado el precio del antimadridismo inherente en las instituciones futbolísticas españolas, que se suponen imparciales pero luego hilan turbios amaños y negocios con otras personalidades del mundo del fútbol de nuestro país.
Los modos irregulares de conformar el roster actual de la eSeFútbol indignaron a la comunidad competitiva española de FIFA en su momento, y recriminaron la falta de limpieza en la elección de los jugadores que, finalmente, pelean bajo el escudo de la Selección Española. Actualmente, los tres jugadores y el coach que han logrado la clasificación para este importante torneo de selecciones no están vinculados de ninguna forma o modo al Real Madrid, ni siquiera a través de las escuadras de eSports en las que juegan habitualmente.
Los jugadores escogidos para representar a la Selección Española son profesionales de gran categoría, reconocidos y laureados dentro de nuestras fronteras, especialmente Zidane10, el último campeón de la prestigiosa eLaLiga Santander Cup. Aun así, sus éxitos quedan opacados por las irregularidades en la elección de los jugadores, lo que hace saltar las alarmas ante nuevas formas de control y eliminación de todo aquello que esté mínimamente relacionado con el Real Madrid.
Esta forma de proceder es un nuevo recordatorio del antimadridismo que lleva la RFEF por bandera bajo el mandato de Luis Rubiales 'Rubi', incapaz de separar el interés general de sus intereses particulares, un reto en el que lleva fracasando más de un lustro. La falta de representación vinculada con el Real Madrid es una tónica dominante, que parece haber pasado del seleccionador de fútbol real a esta nueva modalidad deportiva en la que está inmersa la RFEF de 'Rubi'.