Ayer fue presentado como nuevo futbolista del Fútbol Club Barcelona el ex del Leeds United Rapinha. El futbolista brasileño pertenecerá al Barcelona durante las próximas cinco temporadas por un precio de 75 millones de euros. Muchos periodistas han señalado que el precio por el jugador es desorbitado, más aún cuando las cuentas del club blaugrana se encuentran en sequía.
El Real Madrid que está en una situación económica muy solvente solo ha contratado a cinco futbolistas por encima de ese precio a lo largo de la historia. El primero sería Eden Hazard por el cual Florentino Pérez tuvo que hacer un desembolso de 115 millones. Le sigue el galés Gareth Bale con 101, Cristiano Ronaldo con 94, Aurelian Tchouameni con 80 y Zinedine Zidane con 77,5 millones de euros.
Si se tiene en cuenta este ranking el lector podrá observar que el pago por un futbolista no va ligado a su rendimiento, de ahí que Carlo Ancelotti aún esté esperando lo mejor del jugador belga. Pero si se observa a estos cinco jugadores se ve claramente que el nivel mostrado por ellos antes de que un club pagara esa cantidad desorbitada era mucho más superior al nivel de Rapinha.
Hay gente dentro de la prensa y en el mundo del fútbol que se ha echado las manos a la cabeza con el fichaje del brasileño, ya que no entienden el alto coste que ha tenido que pagar Laporta para hacerse con sus servicios. Es cierto que el mercado en los últimos años se ha disparado y que las cifras astronómicas de hace 10 años no tienen nada quever con las que hay que lidiar hoy día. De ahí que un futbolista como Hazard costara en su momento al Real Madrid 115 millones o que como le ha ocurrido al Barça tenga que pagar 75 por Rapinha.
El inicio de la próxima temporada resolverá la duda en cuanto a la proyección de futuro que tiene el brasileño, pero la carga con la que tendrá que lidiar será muy grande. Muy pocas veces un equipo paga esa cantidad por un futbolista. Es cierto que de un tiempo a esta parte hemos podido ver el fichaje de Haaland, la tentación de Florentino con Mbappé el verano pasado, casos en los que parecía que lo que más importaba era el precio a pagar.
Y a pesar del periodo de la pandemia, donde parecía que el mercado se estabilizaba de nuevo hacia la baja, los movimientos de este verano están superando cifras récord. Ejemplo de ello también puede ser la contratación de Aurelien Tchouameni por el Real Madrid, un jugador que a pesar de tener tan solo 22 años le ha costado a Florentino Pérez la friolera de 80 millones de euros con lo que ello con lleva.
Ahora la pelota está en el tejado de Rapinha que tendrá que emplearse a fondo si quiere superar las críticas que está recibiendo el coste de su fichaje. Pero para ello habrá que esperar a que comience la temporada.