Hay muchos casos de éxito en el Real Madrid. De todos ellos, la mayoría no se contaba ni con ciencia cierta de poder encajar en un equipo de tales dimensiones. Algunos jugadores era un pálpito de la directiva, otros un atractivo mediático o las conocidas peticiones de los entrenadores para contar con jugadores de su confianza.
¿Pero recuerdas alguno en especial que te sorprendiera? El conjunto merengue ya planea su próxima campaña para la 2022/23 y lo hace con un ojo puesto en su plantilla, viendo cómo evolucionan sus hombres y el otro puesto en el mercado de fichajes por si pueden pescar una ganga para sus filas.
Al mercado todavía le quedan días frenéticos y hasta que no suene la bocina definitiva, todo vale en este juego. Una de las posiciones más deseadas para el madridismo es poder encontrar un acompañante para Karim Benzema. El francés acusado de minutos la temporada anterior, quizá le sentaría mejor tener a un socio con el que poder compartir su posición.
La intención del Real Madrid con Benjamin Sesko
El equipo no busca un sustituto, ni mucho menos, sino que pretende contar con posibilidades de tener una delantera de plenas garantías. Se han analizado muchos nombres, pero si hay alguno que llama la atención es Benjamin Sesko.
Más allá de sus cualidades deportivas, técnicas y tácticas, sería una incorporación más que llamativa ya que sería el primero en completar un traspaso al club blanco con la nacionalidad eslovena. Nunca nadie antes ha vestido la camiseta madridista procedente de ese país o esa nacionalidad.
También son pocos los futbolistas que han triunfado, y aun con más motivo, puede ser la excepción que cumpla la regla. Por el club ha habido de todo. La tendencia es que cada vez la plantilla merengue sea un lugar más plural con representantes de numerosas nacionalidades. Ahora mismo conviven un total de nueve nacionalidades. El podio se lo reparten entre: españoles (8), brasileños (5) y franceses (4).
Pero este es el menor de los problemas. Es habitual que en los vestuarios se hable el idioma predominante de la Liga en la que se juega, por ello, todos saben hablar español, quién más quién menos.
El idioma que tiene que aprender Sesko es el del gol y ya se lo sabe
Una prueba de ello es que hasta es voluntad de los futbolistas aprender rápido el idioma para tener una mejor adaptación, véase el caso de Rüdiger, contado en este medio.
Aunque si un idioma claro tiene que hablar este futbolista pretendido por el club, es el lenguaje del gol. Benjamin Sesko por eso no tendrá mucho problema. A pesar de su juventud y las pocas oportunidades que le han ido dando, ya demuestra tener un buen olfato goleador.
En sus 39 partidos como jugador profesional ya acumula 12 goles y 8 asistencias. Un promedio que no está nada mal. Tan solo hace falta ver cómo ha empezado la temporada. En apenas tres partidos jugados ya ha anotado dos goles.
Su actual equipo es la franquicia de Red Bull, en Salzburgo. Milita por tanto en la Bundesliga, enfrentándose a equipos como el Bayern de Munich o Borussia Dortmund.
Es el típico caso de jugador que destacaba en categorías inferiores y le fueron ascendiendo progresivamente. Con la salida de Adeyemi a Dortmund, parte como una de las principales referencias en ataque.
El Real Madrid a la espera de la evolución del futbolista
Sin embargo, el Real Madrid si se apresura, puede conseguir al futbolista por una buena cuantía económica. Su valor de mercado ahora mismo oscila en los diez millones y sería un auténtico banco de pruebas para Ancelotti.
Encaja dentro de la política de fichajes del club. Tan solo tiene 19 años y a pesar de tener contrato hasta 2026, se podría sacar una buena negociación. Renovó hace una temporada, pero sondearle la posibilidad de jugar en el Bernabéu, puede seducirle y mucho.
No sería titular indiscutible, pero contaría con minutos progresivamente, según la confianza de Ancelotti. Ya sabe lo que es ser suplente y a su edad, debería asumirlo como tal. Al estar en edad de crecimiento todavía no ha explotado del todo y es un rol que le gusta mucho al núcleo duro de Florentino.
El joven podría hacer historia y conquistar este récord jamás conseguido hasta el momento por nadie. Veremos qué ocurre de aquí al final de mercado. Menuda sorpresa sería.