En enero de 2020 Bruno Fernandes pasaría de jugar en el Sporting de Portugal al Manchester United. 63 millones de euros y la negativa de Zidane ante su fichaje provocaron que los red devils se hicieran con los servicios del futbolista. Por talento podría haber fichado por el club merengue aunque a Zinedine Zidane no acababa de encajarle.
Quien sí encajaba en aquel esquema del francés era Paul Pogba, un deseo del técnico que nunca llegó a cumplirse. Uno de los motivos principales fue el tanteo de Florentino Pérez, quien negó el fichaje de Pogba por unos antecendentes en los que el futbolista aprovechó el interés del Real Madrid para negociar un sueldo mayor con la Juventus de Turín.
Pero el caso de Bruno Fernandes también tuvo su momento en las oficinas del Real Madrid. El jugador se estaba saliendo en la liga portuguesa y muchos grandes clubes fijaron el interés en el mediocentro luso. Sin embargo, el Manchester United ganó esa carrera y lo cierto es que no se equivocó tal y como muestra su progreso en cuanto a valor de mercado.
El jugador pasó de tener una estimación de 60 millones de euros según Transfermarkt, pero en la actualidad ha sumado 25 millones más a esa calificación. Se justifica en la importancia que ha ido ganando con el club red, convirtiéndose en un imprescindible para los diferentes entrenadores que han pasado por el banquillo del Manchester United.
En la Premier ha disputado 87 partidos, anotando 36 goles y repartiendo 14 aistencias. Unas cifras muy positivas si se tiene en cuenta que ocupa posiciones de centrocampista. Aunque su talento y determinación ofrecen al equipo la posibilidad de tener un referente creador y goleador. Zidane le negó la oportunidad de triunfar de blanco.
Se debe a motivos más que evidentes, además de tener mayor preferencia por Paul Pogba, el técnico francés contaba por aquel entonces en la sala de mandos con uno de los mejores centros del campo de toda Europa. Casemiro, Kroos y Modric completaban la construcción y equilibrio defensivo que el Madrid más necesitaba.
Desde entonces ni Fernandes ni Pogba tuvieron oportunidad de fichar por el Real Madrid. El justificante son 15 Copas de Europa en ese tridente ya inolvidable para la hinchada merengue que tardará muchos años en olvidar a estos tres jugadores. Por calidad, tanto Pogba como Bruno pudieron destacar en el Real Madrid, pero la decisión de sus fichajes fue sopesada y el club merengue no se equivocó.
Su llegada se proyectaba más en la posición de Luka Modric, una competencia que no necesitaba el croata para rendir al nivel que ha hecho desde que se vistiera de blanco. En la actualidad resulta que el Madrid no se equivocó, a pesar de la juventud que tiene Bruno Fernandes, el Madrid apostó por más veteranía en esa zona del campo y se puede decir, hoy día, que no se equivocó.