Con la Liga en marcha y a 13 días del cierre de mercado parece que todo empieza a estabilizarse. Los fichajes ya van cogiendo forma y cada uno de ellos ya pretende tomar fuerza en el once para ser ese refuerzo que le dé una cara nueva a su equipo.
En la Liga los equipos grandes se han reforzado bien y a expensas de lo que haga el Real Madrid, el equipo cerrará su plantilla con dos nuevas incorporaciones: Tchouameni y Rüdiger. Está por ver qué pasará con los casos de Casemiro, Ceballos y Asensio y si finalmente llega ese nueve, que tanto desean en Chamartín.
El PSG y los líos con el Real Madrid
Ancelotti parece ser al que menos le convence la propuesta y en este sentido trata de mirar hacia el vestuario para encontrar una solución a sus problemas. Veremos cómo se las ingenia el experimentado entrenador.
El culebrón del verano se acabó pronto con el “no” de Mbappé y a pesar de que el Real Madrid supo solucionarlo rápidamente con la consecución de la catorceava, parece que el gigante parisino sigue con su premisa de reventar el mercado a toda costa.
Las últimas informaciones alegan que, desde Qatar, tratan de pescar en mares revueltos con el Manchester City de por medio. En el club inglés milita uno de los pretendidos del eterno rival como Bernardo Silva.
Con el portugués se cerraría un capítulo de fichajes excelente. Los azulgranas quieren culminar con un mercado revolucionario, aunque tienen el hándicap de no contar con dinero para inscribirlos a todos.
Bernardo Silva desataría un golpe a la Liga
La incorporación del volante luso, sería otro rompecabezas importante. Desde Francia cuentan con que desde Emiratos habrían ofrecido unos 70 millones. Una cifra golosa para la incorporación del jugador.
No es la primera vez que este club se interpone entre las negociaciones de algún traspaso. Lo mismo intentaron hacer con el caso de Tchouameni. Con Mbappé de por medio, trataron de seducir mediante cuantías económicas su llegada a la capital gala. De no ser por la ambición y voluntad del jugador, otra historia hubiera sonado.
Con el proyecto deportivo que le ofrecía el Real Madrid era irrechazable, pero la lucha llegó a tal punto que ambos clubes llegaron hasta el final por el jugador. Es más, su coste se vio incrementado y fue Florentino quién tuvo que variar el coste de la operación en varias ocasiones.
En un primer momento se habló de unos 60 millones, pero finalmente la cosa acabó ascendiendo a 80 kilos. Al Khelaifi es especialista en entrometerse en este tipo de operaciones. Encaprichado con hacer de su club un líder en Europa, lleva fracasando temporada tras temporada.
El PSG no tiene nada que hacer con la Liga española
Allí en París no tienen competencia para liderar una competición doméstica tan exigente como la española. El nivel es completamente distinto y lo único a lo que se acogen son los petrodólares que ofrecen a sus jugadores. Eso provoca naturalmente una plusvalía entre equipos, motivo por el que no pueden competir con los demás.
Aunque cuando salen a Europa en competiciones como la Champions, queda demostrado que no pueden competir con los otros grandes. El PSG será el juguete roto de Europa. Un quiero y no puedo de libro que trata de ilusionar con grandes nombres, pero sin llegar a consolidar un proyecto ganador.
El caso Mbappé saltó por las nubes. Desde entonces ya pasó a ser el enemigo público del Real Madrid. La voluntad de querer desestabilizar a La Liga y tratar de quitarle ciertos privilegios, no le convertirán en una competición superior.
Con la calidad y prestaciones de los equipos españoles, están a años luz de los diferentes clubes franceses. Por tradición, calidad y experiencia, la Liga es el mejor banco de pruebas dónde han jugado siempre los mejores jugadores.