Planeta Real Madrid ha descubierto que, desde el círculo de Florentino Pérez, reconocen que la marcha de Di María para traer a James, fue un error deportivo. Una de las salidas más sonadas de los últimos años. El argentino salió por la puerta de atrás con varia resignación. Además, todo sucedió en las acaballas del mercado de verano.
La relación del presidente con Di María acabo fracturada. Las partes no acabaron de entenderse. “El fideo” salió muy enfadado del club, con feos gestos a su propia afición en los últimos partidos que disputó, al empezar a escuchar el rumor de su salida.
El argentino no quería salir. Pidió un aumento, algo excesivo para las pretensiones del club y que hubiera provocado mala sintonía entre sus compañeros.
¿Qué ocurrió con Di María?
El Real Madrid le ofreció varias ofertas, tratando de convencer al jugador para que se quedara, pero ninguna fue del agrado del ex madridista. De haberse cumplido el trato, el atacante hubiera sido el segundo jugador mejor pagado de la plantilla, solo por detrás de Cristiano Ronaldo.
Fue entonces cuando, Florentino Pérez, asumió la decisión de dejar marchar a Di María e ir a por James Rodríguez.
En aquel mercado, algo movido, acabó saliendo también Xabi Alonso. Ambos jugadores provocaron un terremoto, cuestionando, que sería del club sin ellos. Sus salidas aportaron al club una cantidad cercana a los 85 millones de euros. El argentino dejó la mayor parte con 75 millones que pagó el Manchester United por él.
Pese a fortalecer su posición como uno de los clubes más ricos del mundo, el Real Madrid fue a por James Rodríguez, para suplir la baja de Di María. La inyección de moral del madridismo fue traer al colombiano, a Toni Kroos y Keylos Navas, con sus grandes aportaciones en el mundial de 2014.
Se destinaron cerca de los 100 millones por estos tres jugadores. Económicamente, la operación de dejar salir a Di María salió bien. Pero deportivamente, el rendimiento de su sustituto natural, James, estuvo muy cuestionado.
Di María supera a James en el plano deportivo
En el plano deportivo, el colombiano brilló en su primera temporada de blanco, pero su talento fue diluyéndose. La competencia en el equipo era rotunda y cada jugador se tenía que ganar su puesto. El mejor Isco, le robaba continuamente la titularidad. Pero si Di María, hubiera aceptado alguna de aquellas propuestas de Florentino, el debate hubiera terminado. En Planeta Real Madrid, hemos analizado las primeras temporadas de Di María y James y los datos son reveladores.
El argentino terminó su primera temporada de blanco en la 2010/11 con 53 partidos disputados por los 46 del colombiano en su temporada de debut, la de 2014/15. En cuanto a los goles, la faceta la gana James Rodríguez, con 17 tantos anotados, por los 9 de Di María.
En cuanto a repartir juego “El Fideo” le da una clase al cafetero con 26 asistencias. Ocho más que el jugador que milita en Catar en la actualidad. El jugador argentino es mucho más utilizado por sus entrenadores en su paso por el Real Madrid que James. En número de minutos casi le supera por el doble de minutos jugados.
¿Qué ha sido de ellos fuera del Real Madrid?
Solo hace falta ver las perspectivas de las carreras de ambos jugadores que ya no forman parte de la entidad del Real Madrid. El afectado en la operación, juega en el PSG desde su salida del Manchester United. Equipo en el que aterrizó de rebote desde Chamartín.
En la Premier no encajó y un año después, en la 2015/16, fichaba para jugar en el Parque de los Príncipes, con un nivel al que estábamos acostumbrados a ver en el Real Madrid. Esa capacidad de desborde para encarar al rival y esconderle el balón para salir hacia el otro lado.
Las fintas del “Fideo” que hicieron levantar al Bernabéu y su verticalidad en el juego para anotar numerosos goles de bella factura.
La carrera de Di María la pudo revertir, comparado con el rumbo que ha tomado la carrera de James, desde que perdiera la condición de estrella madridista. Su trayectoria ha sido algo más atropellada que la de su excompañero sudamericano.
James encadenó dos años seguidos de cesión en Alemania, en las filas del Bayern de Munich. Jugó a las órdenes del actual técnico blanco, Carlo Ancelotti, con el que llegó a sacar su mejor nivel. Su paso por Munich no fue del todo acertado, además acabó perdiendo la continuidad en el juego, para volver un año más de blanco y salir a final de temporada rumbo al Everton.
Allí se volvería a encontrar con el italiano como coach. Al finalizar aquella temporada, el cafetero decidió cambiar de aires e irse a jugar a Catar en el Al-Rayyan, en una liga de muy bajo nivel respecto a las europeas.
La trayectoria de ambos desde que salieron del Real Madrid, ha sido así. Es lo que se suele decir en estos casos, alejado del Bernabéu hace mucho frío. Pero si hacemos el ejercicio a la inversa y Ángel Di María se hubiera quedado en Chamartín, quizá la historia hubiera cambiado.