Uno de los mejores pivotes del fútbol actual juega en el Real Madrid y no es otro que Carlos Henrique Casemiro. Su llegada a un equipo como el de Chamartín se debe a muchas cosas: su talento, su garra o su gen madridista, o la propia paciencia del jugador con su ex técnico Ney Franco. Fue el principal antagonista de la historia, que no veía en Casemiro lo que si vieron otros para que triunfara en Valdebebas.
Su fútbol en Sao Paulo, fue el principal detonante para acometer la operación. Los ojeadores y emisarios del Real Madrid en los países sudamericanos, han demostrado que tienen buen ojo para acertar con el talento que llega al Bernabéu. Ya son varios como es el caso de: Vinicius, Rodrygo o el propio Casemiro.
Su salida de Brasil para llegar al Bernabéu
Son fichajes que se rentabilizan muchísimo, ya que los jugadores los fichan a precios muy bajos, para luego dar el salto de calidad una vez ya forman parte del Real Madrid. Su trabajo, compromiso y esfuerzo demuestra la lealtad que le tienen al escudo. Tan solo basta ver los partidos de Casemiro para demostrar de qué pasta está hecho. Un jugador total, con buen posicionamiento, lectura de juego, rocoso y rápido con la salida de balón para sustentar al equipo y armar cualquier contra. Además, destaca por su pegada y llegada al área rival. Un jugador inteligente y contrastado.
Aunque sus inicios no fueran del todo fáciles en el club blanco, ya que tuvo que salir cedido. Con el tiempo se entendió que era un jugador de futuro. En Brasil, le pasó algo parecido y cada vez veía como sus propios compañeros le ganaban el puesto o se tenía que conformar con el banquillo debido a los fichajes del Sao Paulo. Su proyección se veía muy afectada debido a las exigencias de su entrenador, Ney Franco, que lo dejaba una y otra vez sentado en la caseta. Dejó de jugar de forma repentina y el carioca no podía demostrar su nivel.
La paciencia de Casemiro, la clave de toda la operación
De esta forma, al no confiar en las capacidades de Casemiro, dejaron salir al joven jugador por 6 millones de euros dirección a la Ciudad Real Madrid. Para el Sao Paulo, habría sido una magnífica operación de no haber sido por el mérito del brasileño de consolidarse como uno de los mejores pivotes del mundo.
De forma paciente y entrenando a diario, el jugador consiguió callar bocas de todos sus detractores, para entrar en la dinámica del primer equipo y hacerse con el relevo natural de Xabi Alonso. Su fútbol ha enamorado a cada técnico del Real Madrid que ha tenido. Ha demostrado sus cualidades y siendo admirado por medio mundo por formar parte de una de las medias más exitosas jamás vistas.