Cristiano Ronaldo está viviendo unos días nublados en Manchester debido a que su entrenador Erik Ten Hag no acaba de utilizarle todo lo que a él le gustaría. El luso a sus 37 años está sufriendo una disminución en su valoración de mercado siendo ahora de 20 millones de euros. A pesar de ello es el que mejor valoración tiene a su edad, por delante incluso de su antiguo compañero en el Real Madrid Luka Modric.
Lo que llama la atención es que en cada revisión de su tasación el portugués la ve caer, cosa diferente a lo que ocurre en el caso de Luka Modric quien a pesar de jugar menos minutos que en otras temporadas destaca cuando lo hace y para Ancelotti es clave. Su valoración sigue siendo de 10 millones de euros. No ocurre lo mismo con Cristiano en el United. Este verano el luso pidió salir para poder jugar en un equipo que disputara la Copa de Europa, pero finalmente no lo consiguió y tuvo que permanecer en Old Trafford.
Esas intenciones mostradas durante el verano le han podido provocar daños colaterales como la pérdida de confianza de su entrenador y parte del grupo que vio en estos movimientos cierta falta de compromiso con el grupo. Con Modric no ocurre ni de lejos lo mismo. La afición merengue quiere ver como Luka estira el chicle hasta el límite y su rendimiento hasta ahora no se ha visto mermado por su edad.
También es interesante que en la próxima revisión de valores puede que quien lidere esta curiosa tabla sea el propio Modric ya que la falta de minutos del siete le están causando problemas. Su participación no se intuye clave como ya ocurrió en la temporada pasada y parece que la situación está lejos de aclararse con Cristiano. Su entrenador, Ten Hag está apostando por un dibujo en el que el portugués parece no haber encontrado su sitio.
Y es que si se pensaba que quedarse en el United era sinónimo de minutos puede que no tenga participación de protagonista ni en la Europa League, cosa que a sus 37 años le podría dejar totalmente sentenciado. La situación de Modric tiene otro color totalmente distinto. Para el croata si hay minutos y protagonismo y todo indica a que esta no será su última temporada ni con el Real Madrid ni en la Copa de Europa.