Lo más destacado del primer partido de Erling Haaland en el Santiago Bernabéu no fue lo que hizo el delantero noruego sobre el verde, sino lo que hizo su padre en la grada cuando se enfrentó a los aficionados del Real Madrid.
Una imagen que ha encendido alarmas en el ámbito del futbolista del City y también de la zona noble del Bernabéu. Ni una parte ni la otra quieren que una escena como la ocurrida el otro día en la que el padre de Haaland y sus acompañantes tuvieron que ser expulsados del estadio imposibiliten una relación a futuro.
Petición de Haaland
El futbolista, tal y como apuntan nuestros compañeros de Defensa Central, "habría pedido a su representante y agente, Rafaela Pimienta, que mantenga un contacto cercano con los ocupantes de la planta noble del Santiago Bernabéu. El comportamiento de Alf-Inge Haaland habría sido una de las 'manchas' en una noche que se suponía tranquila para Erling, pero terminó siendo una 'pesadilla' tanto dentro como fuera del campo".
Y es que a pesar del hecho vivido en la grada del Bernabéu, Erling Haaland no descarta un futuro vestido de blanco y para ello sabe que la relación tanto con el club como con la afición merengue no se debe erosionar.
Me pasan esto del padre de Haaland expulsado de un palco del Bernabéu después de haber estado insultado y tirando comida a la gente del Madrid pic.twitter.com/S8QuOjHzWx
— IAM TÓXICO (@inakiangulo) May 9, 2023
Actitud inaceptable
Los gestos del padre de Haaland a cierto grupo de aficionados fueron impropios del representante de un futbolista profesional. Su comportamiento fue reprochable por los mismos agentes de seguridad que trabajan en el estadio. Una imagen nada habitual en el Bernabéu o cualquier estadio del viejo continente.