Rodrygo Goes ha demostrado en este último mes de competición que es un jugador fundamental para la plantilla y se ha ganado a pulso el ser un habitual en el once de Carlo Ancelotti.
El italiano solía utilizar la formación 4-4-2 para los partidos de mayor relevancia en detrimento del brasileño, que tenía que esperar su oportunidad desde el banquillo y era Fede Valverde el que jugaba en esa posición de falso extremo derecho.
Sin embargo, como comentábamos, las últimas actuaciones del exdelantero del Santos han convencido a Carletto para que sea un indiscutible y él cambie su esquema al clásico 4-3-3, con Vinicius, Rodrygo y Benzema como trío de atacantes.
El último portazo de Kylian Mbappé al Real Madrid, asegurando que su objetivo es ganar la Champions con el PSG en el futuro y la explosión del '21', han hecho que el club se haya olvidado por completo del francés y ya esté únicamente pendiente de cerrar la renovación de 'Rodrygoles', cuyo contrato expira en 2025.
Al igual que el ser un fijo en el once de Ancelotti, también se ha ganado con pleno derecho la renovación, a la que ya solo le faltan unos pequeños detalles para llevarla a cabo y que se anuncie oficialmente.
Sin embargo, al igual que sucedió con la de Vinicius, solo existe un problema que afrontar y al que ambas partes deberán llegar a un acuerdo para que la renovación llegue a buen puerto.
El problema de las temporadas
Como decimos, solo hay un pequeño desencuentro entre el club y los agentes de Rodrygo para que la renovación del brasileño sea una realidad y siga vinculado al Real Madrid muchos años más.
Y es que la entidad de Chamartín le gustaría que su contrato fuera hasta 2028, mientras que Rodrygo y su entorno consideran que hasta 2027 es suficiente. Exactamente lo mismo que sucedía con la de Vinicius.
Sin embargo, esto no es ningún problema importante, ya que el Real Madrid está dispuesto a extender su vinculación hasta el año que ellos exigen.
Los puntos del contrato de Rodrygo serán muy similares al de Vinicius, tal y como señalaba hace unos meses el diario ABC: tendrá una cláusula anti-jeques (1.000 millones de euros) y su sueldo incrementará considerablemente.
Los dos futbolistas brasileños perciben dos de los sueldos más bajos de toda la plantilla, pero con sus renovaciones, podrían llegar a ganar hasta 10 'kilos' en el caso de Vini y 7 en el de Rodrygo.
Prácticamente solucionado el problema de las temporadas, se espera que los anuncios de las renovaciones de los dos jugadores con más potencial del equipo se hagan oficial en unos pocos meses.