La Eurocopa sigue condicionando, en cierta forma, los objetivos del Real Madrid en el mercado de pases. Los ejecutivos blancos, buscando completar la plantilla con futbolistas de calidad que encajen en las líneas maestras del actual proyecto deportivo, sondean el mercado de forma constante.
Una de las demarcaciones que necesitaría un refuerzo de forma urgente es el eje de la defensa. Las dudas en torno al estado en el que regresarán tanto Éder Militão como David Alaba después de sus lesiones, además de la salida de Nacho Fernández como agente libre en dirección al Al-Qadsiah saudí, dejan 'solo' a Antonio Rüdiger como única certeza en dicha posición.
La prioridad para resolver ese dilema es Leny Yoro. Si bien es cierto que el joven central francés solo 'piensa en blanco', cerrar su salida con los mandamases del LOSC Lille está resultando una verdadera ordalía por las diferencias entre la oferta blanca y las exigencias financieras de les dogues.
Gran objetivo imposible de fichar
Sabiendo que esas negociaciones pueden fracasar irreversible en cualquier momento, los ojeadores comandados por Juni Calafat aprovechan la Eurocopa y la Copa América para apuntar nombres como el de Manuel Akanji en la agenda blanca. El central suizo, que ha dejado un magnífico rendimiento en el torneo celebrado en Alemania, demuestra que mantiene su nivel de élite incluso lejos del Manchester City.
La inclusión de Akanji en la disciplina deportiva merengue es prácticamente imposible. El zaguero suizo es indiscutible, uno de los 'hombres para todo' que tiene Pep Guardiola en la plantilla del conjunto sky blue. Con contrato hasta verano de 2027 y un valor de mercado de 45 millones de euros, los negociadores mancunianos solicitarían un tránsfer demasiado elevado que la tesorería blanca se negaría a pagar... especialmente porque el propio Akanji tiene ya 28 años.
Así las cosas, el Real Madrid sigue valorando alternativas a Leny Yoro en el mercado de fichajes de este verano. La Eurocopa está demostrando ser un importante caladero de talento que ha provocado los primeros movimientos de la élite futbolística europea: el Arsenal se adelantó a todos fichando a Riccardo Calafiori por 53 millones de euros.