Fabrizio Romano anuncia la fecha del fichaje de Bellingham: "Está cerrado"

Fabrizio Romano confirma que el fichaje de Bellingham por el Real Madrid está cerrado

Periodista
08 de Mayo de 2023
Fabrizio Romano y Bellingham

Jude Bellingham jugará en el Real Madrid la próxima temporada. El acuerdo está cerrado, tal y como confirma Fabrizio Romano en su última actualización del traspaso. De hecho, ya adelanta fecha en la que podría hacerse oficial.

Una vez pactados todos los detalles entre el club blanco y el jugador, ahora son los equipos los que tratan de fijar un precio final por el traspaso. El Dortmund pide 150 millones, pero Florentino Pérez confía en alcanzar un trato por 120 millones de euros.

"El acuerdo está más que cerrado. Bellingham quería jugar en un club histórico y ya ha aceptado la oferta del Real Madrid. Está contento con el salario y su cláusula de rescisión será de 1.000 millones. Este mes de mayo se negociará el precio final del fichaje", explicó Fabrizio Romano.

Por tanto, no se descarta que a lo largo del mes se firme todo, pero que se haga oficial a principios de junio, tras una hipotética final de Champions. Para eso, el Real Madrid tiene que eliminar antes al Manchester City de Guardiola.

Los tiempos dependerán de la eliminatoria de semifinales y de las últimas jornadas de Bundesliga, ya que el Dortmund sigue peleándola con el Bayern. Una vez terminado todo esto, se hará oficial el fichaje de Bellingham por el Real Madrid.

Objetivo cumplido

El galáctico que tanto tiempo lleva siguiendo Florentino y que, a pesar de la dura competencia con otros clubes, lo ha logrado. Bellingham, eso sí, renunciará a mucho dinero por jugar en el Real Madrid. El Manchester City e incluso el Liverpool le ofrecían mejores detalles contractuales.

Así las cosas, como anuncia el periodista Fabrizio Romano, Bellingham está hecho y será futbolista del Real Madrid la próxima temporada. Formando una medular de ensueño junto a otras promesas como Camavinga, Valverde y Tchouaméni. El Bernabéu ya se prepara para recibir a Bellingham con los brazos abiertos.