Tras el empate entre Real Madrid y Atlético, al conjunto de Ancelotti se le avecina un mes de marzo de lo más apretado, tras cerrar un febrero con algo de altibajos. El equipo blanco mereció algo más durante los noventa minutos del derbi, pero así de caprichoso es el fútbol.
Cuando el rival exige y se deja la vida en ello, pasan este tipo de cosas. Con el eterno rival todavía por jugar su respectivo partido, veremos cómo quedará la clasificación después del susto.
El reto del Real Madrid en el mes de marzo
Ahora el vestuario debe centrarse en los siguientes cinco partidos que se le avecinan al club. Dos clásicos, la vuelta de octavos de Champions y dos cruces ligueros como Betis y Espanyol. Un total de tres cruces en casa por dos a domicilio. El calendario aprieta y la cosa se pone seria.
En juego también está el pase a una nueva final de Copa del Rey que se medirá ante el FC. Barcelona en una eliminatoria a doble partido, tras el clásico, visita a Sevilla frente a los de Pellegrini, Espanyol en casa, duelo de Champions ante Klopp y de nuevo otro clásico liguero a domicilio con visita al Camp Nou en el día del padre.
La previsión de Ancelotti
Así se cerraría un mes de marzo exigente pero decisivo con numerosos duelos de altos vuelos. Veremos cómo responde el equipo ante dicho calendario. El fondo de armario de Carletto ha funcionado a las mil maravillas y el madridismo confía en este vestuario hasta que no diga lo contrario.
La liga, que parece el trofeo más complicado hasta ahora; empieza a peligrar, pero nada es imposible. Ancelotti tiene una gran prueba por delante.