Real Madrid y Liverpool se miden este miércoles en Anfield, en uno de los grandes partidos del viejo continente. Ambos equipos se han visto las caras en numerosas ocasiones, especialmente en los últimos años. Incluso se han enfrentado en varias finales de la Champions.
Los red son los actuales líderes de la competición, no han perdido ningún duelo hasta ahora y parten con la vitola de favoritos. Sin embargo, la historia reciente no les favorece ya que siempre han caído. Los merengues se han convertido en su particular oveja negra.
Eso lo sabe bien uno de los capitanes del equipo británico, Van Dijk, que ha visto como se les ha atragantado los blancos. Incluso el último duelo en este estadio, cuando gracias a un gran Vinicius fueron capaces de remontar un 0 a 2 para acabar goleando.
El central ha reconocido que “para ser sincero, no necesito sentir la revancha para estar preparado. Pero es la Champions. Es un partido importante, un duelo muy bonito para el aficionado neutral y queremos dominar y conseguir una victoria”. Un aviso para lo que les espera a los blancos.
Una losa para el Liverpool y para Van Dijk
Como hemos comentado, el Real Madrid se ha conseguido imponer en los últimos duelos en los que se han enfrentado. Algo que en Liverpool recuerdan bien, ya que tiene a los blancos como el rival, fuera de Inglaterra, que más les ha amargado en el siglo XXI.
Hasta tal punto que Van Dijk recuerda que “nunca les he ganado. Ese récord es decepcionante, así que tenemos que recuperarnos y estar preparados para este partido". Por lo tanto hay algo que sí les va a hacer ir a por la venganza. Una espina clavada que se quieren sacar.
En el Real Madrid están avisado, porque además hay otro factor que no olvidan, y es en el mercado. Bellingham y Tchouanéni parecían más cerca de Anfield, pero acabaron aterrizando en el Bernabéu. Un doble golpe en el mercado del que también buscarán la revancha.