La situación del Fútbol Club Barcelona está resultando bastante complicada para la directiva del club, ya que deben resolver los problemas económicos además de los deportivos. La plantilla no está teniendo el rendimiento esperado en comparación con la campaña pasada.
Aunque el equipo no está desplegando un juego vistoso, están obteniendo resultados a pesar del bajo rendimiento de los jugadores de Xavi Hernández. Sin embargo, como es costumbre, no están conformes con los resultados en el conjunto catalán.
Es por esto que intentan suplir el rendimiento futbolístico con otras cuestiones, y el club está solicitando algo que podría considerarse ridículo, más por desesperación que como una solución contundente.
La directiva actúa con desesperación
Los dirigentes del conjunto catalán están pidiendo a la afición que el próximo encuentro en Montjuïc sea una caldera para crear un ambiente que intimide al rival y tratar de recuperar los puntos perdidos respecto al líder de la competición, que es el máximo rival, el Real Madrid.
Esta acción solo refleja la pésima gestión del conjunto catalán con sus jugadores y también con el director técnico, quien no está logrando sacar el mejor rendimiento de los futbolistas en el terreno de juego. Parece que están apelando principalmente al ánimo de la afición.
Aunque es cierto que el ambiente en un estadio puede influir en los rivales, también es evidente que el equipo catalán no atraviesa un buen momento en lo deportivo y necesita recurrir a este tipo de peticiones para intentar obtener una ventaja contra sus rivales.
No les queda más opción a los aficionados del Barcelona
Lamentablemente, el equipo no está rindiendo al nivel esperado y la afición del Barcelona tendrá que recurrir a la presión en el estadio para obtener un resultado positivo, ya que al menos en lo deportivo están quedando en deuda.