Juegan juntos en Brasiil, fueron héroes en el Santos, y ambos cumplieron su sueño de triunfar en Europa y pasar, al menos, por el Real Madrid. Entre brasileños parece que la cosa se entiende.
No es la primera vez que a Rodrygo se le descubre una de sus grandes aficiones y esta es el póker. El madridista ha conseguido hacerse un nombre en el fútbol y las piezas encajan de maravilla.
Este cuando no está pateando un balón, descansa desconectando lejos de la cancha apostando con fichas y haciéndose de oro.
La afición la comparte con Neymar
Aunque a decir verdad, no es el único que juega a este tipo de juegos. La afición por el póker también es compartida con Neymar y entre ambos brasileños parece que ha funcionado a las mil maravillas.
En las concentraciones de la selección es el juego que se ha puesto más de moda y así lo reflejan en cada encuentro que tienen. Un pasatiempos de categoría.