La llegada de Marco Asensio al vestuario blanco, confirmó en mayor medida, la voluntad y apuesta por los jóvenes. Había una clara intención de renovar el vestuario con jóvenes talentos que ilusionaran al madridismo con años por delante para crecer y hacer historia en el club.
En la temporada 2016 llegaba el balear a la entidad blanca y desde entonces, encontró su sitio en la plantilla. Arropado por sus compañeros, supo encajar muy bien en el grupo. Su calidad, toque y manejo del balón ya le abrieron paso desde su aterrizaje, pero el buen humor y cachondeo que compartía fue del agrado de todos.
En “Campo de Estrellas” el programa de Real Madrid TV, en el que se conoce la vida más íntima de los futbolistas, desvelaba la comunión que se respira entre ellos. Surgieron varias bromas, que no hacían otra cosa que unir más al grupo. La buena sintonía entre ellos, era ejemplo de la conquista de grandes títulos y el secreto para seguir ganando.
No solo fuera del terreno de juego sucedían estas cosas, sobre el verde también pasaba. La conexión entre los jugadores era bestial y se buscaban unos a otros para armar una jugada de peligro tras otra.
Isco y Asensio: conexión al instante
Pero si debemos destacar a alguno, fue la relación que todavía mantienen Marco Asensio e Isco Alarcón. Mallorquín y malagueño, congeniaron a las mil maravillas, ¿qué madridista no ha escuchado la frase: “si tu eres mi picha, yo soy tu bro”.
La hemos escuchado en innumerables ocasiones. Ambos la pusieron de moda vía redes, tras la conquista de cada título. Muy sonrientes siempre, se contestaban el uno al otro para animar a la parroquia blanca.
El origen de los “pichabros”: Isco Alarcón y Marco Asensio
El origen de esta anécdota, nos remonta a las sesiones de entrenamientos que tenían los jugadores en Valdebebas. Como símbolo de esa fuerte amistad, se prometieron entre ambos que siempre se respaldarían. Allí fue cuando Marco, le soltó la frase de los “pichabros”. Para Isco, el “11” blanco es su “bro” y para el balear el mago malagueño es su “picha”.
Desde entonces los hemos escuchado en cada celebración. Los aficionados ya los esperan expectantes a lo que dirán. Han conquistado 13 trofeos con el equipo, desde la llegada del último al conjunto blanco. Numerosos vídeos se han dado para repetir su lema de vida compartido.
El buen rollo y el humor nunca falta en el vestuario con ellos
A medida que iban ganando títulos, los dos jugadores de ataque del Real Madrid, iban añadiendo algo más.Es decir, con la conquista de la Copa de Europa en Cardiff, añadieron “pero con una champions”, al final de la frase. Esta muletilla la han ido cambiando cada vez que ganaban un título diferente.
Era una oración aplicable a cada circunstancia. Un vídeo de pocos segundos, pero que mostraba las carcajadas entre uno y otro. Han compartido grandes momentos juntos. Llevan en el mismo vestuario seis temporadas. El malagueño, lleva tres años más en el club, pero ambos tienen una calidad excelsa.
Su toque de balón es exquisito y a pesar de no contar con la titularidad absoluta, su fútbol les haría titulares en muchos equipos. Ambos han decidido pelear por un puesto y se alejan de cualquier rumor. Al de Arroyo de la Miel, se le acaba el contrato al final de la presente temporada, y a Asensio la temporada siguiente.
Los pichabros deben estar juntos siempre y hacer historia en el club. Isco es mayor que Asensio, por cuatro años. El malagueño ganó el Golden Boy en 2012, el trofeo que le consideraba el mejor joven menor de 21 años del momento. Asensio tiene mucho potencial y solo hace falta ver su pegada a portería.
Muchas bromas de Asensio: pura alegría
El” tobillo loco” es otro de las bromas que caló fuerte en el vestuario. En las primeras temporadas de Marco en el club, se puso de moda esta expresión. El atacante, especialista en desbordar rivales para salir del paso, tenía un gesto con el tobillo que lo movía muy rápido de un lado a otro.
Con dicha técnica, se deshacía muy rápido de sus rivales y conseguía generar peligro. A partir de entonces, le empezaron a llamar “tobillo loco”.