Parece que en el intenso comunicado conjunto que han realizado los clubes de primera división contra el caso de la polémica arbitral frente a Negreira y el FC. Barcelona, ha habido una gran ausencia destacada.
Florentino está jugando sus cartas
Este es el mismísimo Real Madrid, quién parecía el más indicado para liderar esa queja conjunta frente a todas las injusticias que había sufrido en todos estos años. Aunque todo se debe a un motivo justificado desde Chamartín.
La planificación del club pasa por mantenerse al margen y esperar a que la Fiscalía lo estudie detalladamente hasta que no haya una sentencia en firme.
De todos es conocido que la relación entre el máximo mandatario blanco y el presidente de la Liga, no es que sea la más agradable posible y a Florentino le gustaría pactar con el eterno rival para llevar a cabo su proyecto que tiene en mente desde hace meses: la ansiada Superliga.
Si el Barça está con él, ya serían dos colosos fundamentales para tratar de volver a relanzar el vuelo con esa iniciativa. Esta es la nueva ilusión del madridismo que ve como el fútbol está muriendo en la orilla.
El madridismo espera su oportunidad
El club prefiere tener de su lado a los culés y que estos también se sientan cómodos al ser dos de los equipos más grandes del momento. Florentino lleva tiempo echándole un pulso a Javier Tebas y parece que cada vez le va comiendo más la tostada.
El FC. Barcelona debería pagar por lo sucedido, pero el club blanco sabe que eso ya es cuestión de la justicia. El transatlántico blanco espera agazapado a la oportunidad que se le puede presentar en pocos días, veremos si surge efecto.