La renovación de Luka Modric es uno de lso temas más candentes de cara al próximo curso. Que el balcánico siga contando como si nada para Carlo Ancelotti no es baladí y eso solo hace indicar que su presencia en el equipo de cara al próximo debería ser casi obligada.
Los planes de Modric de cara al próximo curso
Pensando en la planificación deportiva, sus prestaciones de genio no las transmite tampoco ningún jugador en el mercado y eso bastaría a la cúpula merengue para seguir contando con él, al menos, durante una temporada más.
Comprometido, hábil, visionario y con alma de veinteañero, sigue jugando al fútbol como los ángeles. Por mucho que vengan refuerzos, será difícil decirle adiós y es que en el vestuario ya es toda una institución. Lleva casi media vida en Chamartín y a sus 37 años nadie se imagina un equipo sin él.
Todos satisfechos con su rendimiento, jugador y club habrían llegado a un pacto casi de “no agresión”. Las propuestas apuntaban a que la directiva le pedía renunciar a su selección, algo que no convencía al futbolista, pero llegados a ese punto este propuso dar su palabra de amoldarse a las peticiones que le fueran haciendo.
La cláusula especial para su nuevo contrato
De esta forma, no renunciará a la selección, pero les habría prometido que se dosificará y le pedirá al técnico croata mayor rotación para poder estar bien el año que viene, en la que se prevé su última temporada.
Hoy apunta al once ante un partido trepidante de Champions. El jugador que volvía de lesión, ya tuvo minutos en La Cartuja para probarse y hoy podría salir de inicio tal y como tenía pactado con Ancelotti. Veremos cuál es su techo y si nos sigue regalando más actuaciones para enmarcar. Contar con él es un auténtico seguro de vida.