Kylian Mbappé está viviendo un calvario en París. El delantero francés, que sigue aparentando calma y tranquilidad, está muy dolido con todo lo que está sucediendo en su entorno, por cómo Al-Khelaïfi le está tratando y avergonzando delante de todo el mundo.
El ariete no ha actuado de mala fe, su deseo es finalizar el contrato que le vincula con el PSG, pero no renovar más allá de la fecha estipulada. Tiene derecho a ello y no por eso tiene que recibir amenazas, presiones y coacciones, como está siendo el caso.
El Real Madrid es su única salida. Desde París y Qatar ya se le ha advertido que, sino renueva su contrato, se va a pasar un año en blanco, en la grada, sin competir, y eso irremediablemente le empuja a buscar una salida, y ese destino es el Santiago Bernabéu.
Una confesión que lo aclara todo
Kylian Mbappé ha disfrutado, como el resto de los futbolistas, de unos días de descanso durante el mes de junio y principios de julio. El francés ha sido cazado en Miami y Camerún, gozando de sus días libres como cualquier otra persona.
No obstante, de las vacaciones de Mbappé sí que se puede extraer un hecho noticioso, y bastante llamativo. El delantero de Bondy coincidió con el brasileño del Real Madrid, Vinicius Júnior. Ambos mantienen una relación muy buena, desde el respeto y la admiración.
Al parecer, Mbappé le confesó en ese encuentro que quiere fichar por el Real Madrid cuanto antes y así compartir vestuario con el brasileño. El delantero madridista siente una gran admiración por el francés, por lo que estaría más que encantado de compartir delantera con él.
Este gesto se intuye como definitivo y más que revelador. Mbappé no lo esconde y desea que Florentino y compañía puedan cerrar el traspaso del francés cuanto antes.