El Barcelona consiguió este miércoles que Dani Olmo y Pau Víctor vuelvan a estar inscritos en su plantilla después de que el Consejo Superior de Deportes (CSD) concediera la titular que el club azulgrana solicitó a través de un informe de más de 50 páginas.
El CSD, dependiente del Gobierno, nuevamente a la excepción y a la Supercopa de España para volver a dar un trato de favor al Barça, que sigue saliéndose de rositas y da igual que cumpla o no las normas. Son la eterna excepción, tanto en política como en fútbol. Recuerden, por si acaso, el lema del Barcelona…
El ‘caso Olmo’ ha llegado a su desenlace, aunque no es el final. El CSD debe estudiar ahora a fondo y en profundidad si la cautelar se convierte en una medida definitiva. Pueden pasar hasta tres meses para que el ente, adscrito al Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deporte, ofrezca su informe definitivo.
Un tiempo que, por otra parte, muchos no necesitamos para afirmar que no pasará nada, como siempre. Y Juanma Rodríguez ha sido el último en recordarlo, en el editorial que ha ofrecido a los oyentes de ‘El primer palo’, el programa que dirige y presenta en esRadio.
Después de enumerar todas las últimas mentiras de Joan Laporta (que Messi se quedaría, el fichaje de Nico Williams, la inscripción de Olmo antes del 1 de enero…), el famoso periodista se refería a una posible dimisión del presidente culé. Un tercio de aficionados, según una encuesta de ‘El Chiringuito de Jugones’, aboga por su continuidad.
“Si yo fuera culé, que gracias a Dios no lo soy, me parece que estaría cargado de razón para pedirle al presidente más mentiroso de la historia del fútbol mundial que se fuera a su casa por donde había venido”, señalaba Rodríguez.
Del miedo... a Negreira
Juanma Rodríguez desgranaba punto por punto las incoherencias por parte de cierto sector del barcelonismo: “Cuando se dicen todas estas cosas, los laportistas, que no barcelonistas, dicen algo que verdaderamente uno sólo puede tomarse a broma, y es que si yo estoy diciendo que Joan Laporta mintió con Messi, con el Camp Nou, con Williams o con Olmo no es porque todas estas cosas sean ciertas, no, sino porque le tengo miedo a Laporta”.
“Es algo verdaderamente fantástico y que habla bien a las claras del auténtico frenopático en que se ha convertido ese club. Pues por supuesto que si yo llego hoy a esRadio y me encuentro a un señor que me asegura que es Napoleón Bonaparte le voy a decir que está como una chota”, proseguía Rodríguez, que siempre se mueve con soltura desde las ondas.
No obstante, el periodista madrileño no quería dejarse nada en el tintero y acabó señalando el principal problema que tiene el Barça, que no es el ridículo protagonizado en el ‘caso Olmo’ sino los pagos que se realizaron a José María Enríquez Nereira, vicepresidente del Comité Técnico de Ábitros (CTA), durante, al menos, 17 años.
“No tengo nada contra Olmo, me parece que la gestión es horrible y creo que sacar a Heurtel de China, traerle a Barcelona y, cuando ya está en España, decirle que no le pueden fichar porque cuatro frikis están subiéndose por las paredes en X, es terrible. Pero todo esto, Olmo, Heurtel, el Camp Nou, Williams, Messi… todo esto son lágrimas en la lluvia, que diría Roy Batty, porque este caballero, Joan Laporta i Estruch, cuadruplicó lo que estaba cobrando del Barcelona el vicepresidente de los árbitros en activo”, manifestaba Rodríguez.
“Oídme bien, Laporta pagó a Negreira, el Fútbol Club Barcelona estuvo pagándole al número dos de los árbitros durante 17 años. Pagaron Laporta, antes que él Gaspart y, después que ellos, Rosell y Bartomeu. Y es muy probable que pagara hasta Núñez. Estuvieron pagando desde que en España se estrenó ‘Samurai Jack’”, insistía Rodríguez.
“Mientras no haya consecuencias al mayor escándalo de la historia del deporte español, a mí lo demás me parecerá una broma. Por mí como si logran inscribir a Hansi Krankl, a Hristo Stoichkov y a Gary Lineker. Lo gordo, lo importante, lo relevante es lo otro. El elefante. Me parece bien que haya quien se distraiga con estas cosillas. Adelante. Pero, insisto, el Barcelona pagó a Negreira durante 17 años. ¿Lo demás? Lo demás son lágrimas en la lluvia”, zanjaba Rodríguez, uno de los periodistas que no se rinden en denunciar las corruptelas del Barça.