El Real Madrid se llevó los tres puntos de Montilivi este sábado ante el Girona (0-3) y, a pesar del tropezón en Bilbao del miércoles, el conjunto blanco sigue metido de lleno en la lucha por la Liga después del ‘pinchazo’ del Barcelona con el Betis (2-2).
El equipo que comanda Carlo Ancelotti tardó en entrar en el encuentro, en un primer tiempo donde los catalanes lograron estar mejor, pero un gol de Jude Bellingham cuando se aproximaba el descanso desequilibró la balanza para los merengues.
El Madrid fue muy superior en la segunda parte y, con dos goles seguidos de Arda Güler y Kylian Mbappé, el partido fue sentenciado a la hora. Y tuvo más ocasiones el francés para agrandar la goleada, pero no pudo ser.
Sin embargo, también hay malas noticias y, cómo no, en forma de lesiones. Jude Bellingham se tuvo que retirar en el 59’ después de notar un pinchazo muscular. Igual que Ferland Mendy, que sintió un latigazo en uno de sus muslos y pidió el cambio a diez minutos del final del encuentro.
Apoyo de Florentino
Florentino Pérez, que siguió el partido con mucha atención desde el palco de Montilivi, bajó al final al vestuario para felicitar a los jugadores. El máximo dirigente del Madrid también se interesó por los jugadores que acabaron tocados.
El Madrid tiene el próximo martes (21 horas) una cita trascendental en Champions frente la Atalanta, en un duelo que servirá para medir el futuro del equipo blanco en la máxima competición continental y las recientes lesiones de Bellingham y Mendy se unen a la de Rodrygo, que no viajó a Gerona al ser baja de última hora.
“Está bien, disponible”, señalaba Ancelotti en la rueda de prensa posterior al partido sobre Bellingham. “Hemos tenido la lesión muscular de Mendy, pero el resto han sido golpes, nada más”, zanjaba el transalpino.