Este próximo miércoles, a partir de las 21:30, el Real Madrid visitará Pamplona para intentar llevarse la victoria y estar un paso más cerca del título de liga. En caso de conquistar el feudo ‘rojillo’, los blancos estarían únicamente a cuatro puntos de proclamarse campeón, por lo que sería un triunfo importantísimo para dejar cuanto antes sentenciado el campeonato.
En el encuentro disputado en el Santiago Bernabéu, los de Ancelotti no pudieron pasar del empate a cero ante el Osasuna, al igual que sucedió la temporada anterior en campo de los locales, por lo que el Madrid intentará cortar esa mala racha en esta nueva jornada liguera.
El estadio El Sadar ha sido siempre un campo profundamente antimadridista y de gran dificultad y asfixio para el conjunto blanco, debido a la olla a presión que hacen los aficionados del Osasuna hacia el Real Madrid.
Las historias de los Osasuna-Real Madrid
Hay varias anécdotas sucedidas en Pamplona que explican esta rivalidad, como la del 28 de enero de 1989. Los ultras del Osasuna se dedicaron a insultar y a realizar varios cánticos ofensivos contra el portero madridista de aquel entonces, Paco Buyo. Las infamias contra el gallego dieron paso al lanzamiento de objetos desde la grada, como un petardo que explotó al lado del guardameta. El colegiado del partido decretó la suspensión del partido en el minuto 43.
En el año 2008, el futbolista rojillo Puñal puso por delante al Osasuna al transformar un penalti en el 82 de encuentro, pero el Real Madrid acabaría remontando con dos goles de Robben e Higuaín en dos minutos, que certificaban la liga número 31 para los merengues.
En la temporada 2010/2011, Pandiani aseguró en rueda de prensa, después del partido de aquel año, que acabarían ganando los navarros por 1-0, que a Cristiano Ronaldo le faltaba un tornillo, debido a que el portugués le soltase al borde del descanso “y tú, ¿cuánto cobras?"
Otro momento icónico de esta rivalidad tuvo también al ‘Bicho’ como protagonista. El astro de Madeira anotaría en la siguiente campaña un golazo espectacular desde casi 40 metros, que dejaría helado el Reyno de Navarra. Tras el ‘chicharro’, Ronaldo se señaló el muslo de la pierna derecha, con la que había logrado el tanto, algo que no sentó nada bien a los aficionados locales. El Madrid acabaría ganando aquel partido por 1-5.