El fútbol alemán es una de las potencias actuales de generadores de grandes futbolistas. A la vista está el interés del Real Madrid en hacerse con los servicios de Rüdiger, además de los rumores que relacionan a Wirtz y a otros jugadores germanos. El fichaje del zaguero del Chelsea puede ser muy interesante.
En el cruce de Champions, coincidimos todos que cuajó un sensacional partido, además de anotar un gol. Unas prestaciones que dejaron impresionados a más de uno. Si el jugador desea venir, en Chamartín están encantados con hacerle sitio. No sería el primer alemán que viste de blanco. Sin ir más lejos, en la actual plantilla contamos con Toni Kroos. Uno de los mejores mediocentros que ha aportado el club en materia de fichajes.
En Planeta Real Madrid, nos hemos dado cuenta que el perfil del alemán es un jugador poco visto en el equipo. Tan solo han sido nueve los jugadores de esa nacionalidad que han estado en el vestuario del Bernabéu. La mayoría de ellos en la historia reciente del club, a lo largo de este siglo XXI.
Si los mencionamos a todos encontraremos a: Kroos, Stielike, Khedira, Ozil, Illgner, Netzer, Breitner, Metzelder y Schuster. Todos han tenido algo de relevancia en el equipo en el tiempo que han estado. Grandes prestaciones la de estos jugadores que dejaron un grato recuerdo en el Bernabéu. Tenían todos una personalidad abrumadora que les convertía en únicos. Porteros, zagueros, mediocentros o atacantes e incluso entrenadores, como Schuster.
Las generaciones alemanas siempre han aportado buenas vibras. En el Real Madrid ha habido numerosos clanes de futbolistas: brasileños, españoles, franceses, holandeses…pero los jugadores alemanes pocos han jugado juntos. Los más cercanos fueron Özil y Khedira o Breitner y Netzer. ¿Qué fue de ellos?
Los alemanes del Real Madrid
- Kroos: Sigue jugando a un grandísimo nivel. Aunque su rendimiento siga yendo en un coche de gasolina, parece que no se le acabará nunca el combustible. Un pulmón para el medio campo blanco. Ordena, coloca y dirige la batuta del Real Madrid a la perfección.
Toni Kroos
- Khedira: Fue un pivote muy interesante que llegó tras el gran mundial de 2010. Su puesto lo compartió con Xabi Alonso, haciendo una dupla infalible en la medular. Tenía buen toque de balón y cubría muy bien las espaldas. Era un jugador muy posicional y seguro de sí mismo.
- Özil: Quizá el más habilidoso de todos ellos. Un jugador también sacado de la Alemania de 2010. Jugaba fantásticamente al fútbol, pero su actitud extradeportiva le condenó demasiado pronto. Era muy habilidoso y sabía conectar muy bien con sus compañeros. Junto con Cristiano Ronaldo formaron una conexión letal. El alemán ponía el balón dónde su compañero quería.
Mesut Ozil
- Illgner: Respetando a Casillas, fue uno de los grandes guardametas que descubrió el Real Madrid. Grandísimas atajadas que consolidaron al portero como un cerrojo en toda Europa. Suyo fue el éxito de la Séptima, con grandes atajadas. Un portero muy serio, con muchos reflejos y recursos para frenar las embestidas del rival.
- Breitner: Quizá más conocido por su faceta extradeportiva. El zaguero estuvo poco tiempo en Madrid, pero aquella melena a lo afro trajo muchas alegrías al Bernabéu. Era un portento físico. Un jugador rocoso y serio en el campo.
- Metzelder: Un central que aterrizó en Madrid en el final de su carrera, pero que levantó el caché de la plantilla blanca. Hábil, con buena salida de balón y visión de juego. Iba muy bien por alto debido a su gran envergadura.
Christopher Metzelder
- Netzer: Jugador sereno, con mucha clase y potente disparo. Ganó dos Ligas con la camiseta del Real Madrid. Su visión de juego ayudó a que en 1972 el conjunto germano, se proclamara campeón de la Eurocopa y dos años más tarde, campeón del mundo.
- Stielike: Personalidad y contundencia en el centro del campo. El germano destacaba por su impecable colocación y entrega. Un futbolista combativo que dejó huella tras ocho temporadas en el Real Madrid en las que consiguió siete títulos. Un jugador de casta que imponía su presencia en el campo.
- Schuster: Su presencia en el medio del campo era esencial. Esa melena rubia dirigió y gobernó el centro del campo del Real Madrid durante mucho tiempo. Muchas alegrías las que dio el alemán en el Bernabéu. Un jugador con mucha pegada, habilidoso y con visión pragmática del juego.