La jornada ocho del campeonato liguero enfrentará a Real Madrid y Getafe a partir de mañana a las 21:00. El duelo se disputa a domicilio en el Coliseum Alfonso Pérez, dónde el cuadro de Ancelotti tratará de mejorar su registro de la temporada pasada. Una derrota por la mínima (1-0) fue el resultado de entonces, aunque solo significó la segunda de la temporada, la cuarta en total.
Suele ser un conjunto rocoso para muchos rivales, ya que su feudo como local es un fortín para los grandes. La temporada pasada así lo demostraron y a pesar de los cambios, Carletto no supo reaccionar a tiempo. Un gol tempranero cambió la percepción de los merengues, que se quedaron encallados allí.
Aunque la hemeroteca pone como favorito al madridismo. Los datos nos indican que solo han perdido dos de los últimos choques en ese estadio y han salido invictos las siete últimas ocasiones.
Getafe es un municipio de la comunidad de Madrid a unos 20 kilómetros de la capital. La localidad tiene a su equipo a media tabla, con el que lleva numerosos años en primera. Por su cercanía podríamos pensar que son muchos los jugadores que nutren la cantera blanca o que algunos de los jugadores proceden de allí, aunque la realidad es justo la contraria.
Alfonso fue el primero de la lista
Tan solo hay tres en toda su historia que hayan nacido en esa localidad: Alfonso, Javi Sánchez y Hugo Duro. El primero de ellos ha sido quién ha tenido más suerte en este sentido. Canterano del club, fue escalando posiciones en su día hasta debutar con el primer equipo. Cuatro años en el primer equipo en la década de los noventa le sirvieron para ganarse un nombre en el fútbol español.
Jugaba de delantero centro y en su palmarés cuenta con algún título como: Una liga, otra Copa del Rey y una Supercopa. Tras su etapa de blanco pasó por equipos como el Betis, dónde también consiguió un gran legado o hasta equipos como el eterno rival, dónde jugó dos temporadas para luego irse a Francia con el Olympique de Marsella y regresar al Betis, para terminar allí su carrera.
Sus números como blanco, pasan por haber superado el centenar de partidos (119) con 48 como titular, completando 28 de ellos. De cara a portería logró un total de 22 goles en las cinco temporadas que militó con el Real Madrid.
Javi Sánchez no tuvo premio suficiente
Los otros dos jugadores, Javi Sánchez y Hugo Duro, son más recientes, aunque cada uno tiene su propia historia. El primero y defensor, escogió el camino a la inversa como Alfonso.
Se mudó a la cantera madridista y allí empezó su recorrido en el mundo del fútbol. Escalando y superando retos durante cuatro campañas, le sirvieron para colarse en alguna convocatoria del primer equipo. Aunque la exigencia, le privó de conseguir la oportunidad tan deseada por todos los jóvenes.
Muchos hablaban de él como el futuro para la zaga merengue, ya que tenía condiciones para hacerlo. Era alto de 1,86 de altura y su juventud se asomaba como central con proyección.
Aun así, esa competencia le alejó de los planes que estaban previstos y solo contó con 45 minutos en un partido ante el Celta de Vigo en Balaídos. Jugó la segunda mitad en un choque que acabó recibiendo el equipo dos goles vigueses con él sobre el verde. El partido acabó en victoria con remontada incluida y pudo jugar como pareja de central de Sergio Ramos. Una experiencia inolvidable que con su carisma y actitud le sirvió para fichar por otro proyecto como el Real Valladolid. Allí en Pucela lleva cuatro temporadas rindiendo a un buen nivel. Se ha hecho mayor el joven.
El caso de Hugo Duro, el más extraño
El tercer caso es el más extraño de todos. Se trata de Hugo Duro quién hizo un experimento algo extraño o poco usual. Este era canterano del conjunto azulón y tras convertirse en un descarte de su propio equipo, se le propuso encima de la mesa la posibilidad de ayudar al filial blanco. Una temporada en la que dio mucho de sí.
Se convirtió en una referencia con el Castilla, ayudó a los mirlos a conseguir sus objetivos y ese buen trabajo, le permitió jugar en dos partidos con el primer equipo. Cerca de la media hora por partido, en calidad de revulsivo, jugó ante Real Valladolid y Real Sociedad. El balance de ambos partidos: una victoria y un empate. Por mala fortuna no obtuvo mayor reconocimiento y eso le devolvió a su Getafe. Aunque este también se lo acabó sacando de encima con una venta al Valencia.