El ídolo francés Karim Benzema creció en uno de los municipios más modestos de Lyon, Bron, una localidad donde la tasa de paro es muy superior a la media y la delincuencia juvenil en la época de los noventa está disparada. Su barrio, Terraillon, estaba repleto de edificios viejos deteriorados, típicos de un suburbio.
Aquí pasó una parte de su infancia, en donde tuvo amistad con unos vecinos que también tenían un hijo que se llamaba Karim. Durante esa época los niños jugaban en las calles y admiraban a las personas que se pasaban en elegantes coches deportivos y se identificaban con ídolos de los 90.
Como pudo ser Mike Tyson, jugador de boxeo, muy famoso por aquellos tiempos, ganador por dos veces el título mundial de los pesos pesados en la década de los 80, el boxeador más joven de la historia en conseguir un título mundial, cuando en noviembre de 1986 ganó el título de la WBC ante Trevor Berbick con tan solo 20 años, a quien idolatraba Karim Benzema. Aunque el motociclismo fue una de sus pasiones, finalmente decidió dedicarse al fútbol.
Otro de sus ídolos era Mike Tyson
Su madre nos habla que desde que era muy pequeño quería jugar al fútbol, hasta tal punto de que tuvieron que comprarle una pelota menos un ruidosa para que pudiera jugar tranquilamente y sin molestar a nadie.
Hizo sus pinitos dentro del mundo del motociclismo, aunque finalmente decidió decantarse por el fútbol, ya que para introducirse en ese mundo tendría que ingresar en un centro especializado, algo a lo que Karim no estaba dispuesto, ya que supondría separarse de su familia y amigos.