Aurélien Tchouaméni tuvo una infancia cargada de castigos de los profesores debido a lo mucho que hablaba en clase. El jugador francés se ganó entre sus compañeros la fama de hablador, cosa que demostró muy pronto cuando estaba en la cantera del Girondins de Burdeos. Un gran comunicador que provocó algunos problemas en clase y que traía a los profesores de cabeza. Pero esa habilidad para hablar le serviría como futbolista.
A pesar de ello, Tchouameni ha desarrollado una gran capacidad de lectura. Y es ahí, en los libros donde el centrocampista del Real Madrid encuentra gran parte de las frases motivacionales en las que se apoya para mejorar y motivarse. Muchos lo definen como una rata de biblioteca debido a esta afición tan erudita que tiene. Cesc Fábregas lo definía como un gran compañero y con una muy buena mentalidad, cree que puede jugar en cualquier posición del campo.
De él dice que dentro de unos años podrá jugar incluso de diez. Y no se sabe si es que Tchouameni convenció a Fábregas de ello a través de sus palabras o es que realmente el ex del Fútbol Club Barcelona y compañero de Aurélien en el Mónaco lo cree de verdad. En el Real Madrid la capacidad de hablar será muy bien vista, si quiere continuar con la actitud de Casemiro tendrá que hablar mucho con sus compañeros para organizar el medio del campo.
Sus profesores ahora recordarán esta falta de respeto a sus compañeros con cierto cariño, pues al final ha valido la pena. El jugador francés acaba de firmar un gran contrato con el Real Madrid y ya sueña con levantar la Copa de Europa con el mejor equipo del continente, él tuvo la opción de ir al Liverpool, al Paris Saint Germain y al Real Madrid. Finalmente se ha inclinado por su favorito, el Real Madrid, equipo con el que sueña pasar a la historia de este deporte.