Pablo Laso concedió una entrevista como invitado especial del programa 'Real Madrid Conecta' para la televisión del club. El entrenador vasco, que ya tiene 54 años, quiso hablar acerca de su vida dentro del mundo deportivo y más en concreto en el banquillo merengue, al cual llegó en el verano de 2011.
El vitoriano quiso ponerse un poco filosófico y hablar de algunas citas que le gustan mucho: 'la vida no consiste en esperar que pase la tormenta, sino en aprender a bailar bajo la lluvia'. A cuenta de ésta, Pablo comentaba que las cosas no siempre te van a ir bien y lo que hay que hacer es aprender a convivir con las dificultades, que son parte de la vida. El técnico apunta a que es una persona muy normal y tranquila fuera de la pista.
Aficionado al cine y la lectura
En sus ratos libres, entre sus aficiones destacan las series y la lectura, pero confiesa que durante la temporada es incapaz de leer ya que le cuesta mucho desconectar. Pese a eso, lo intenta. También cuenta que ahora prefiere ver series a películas, pero que en sus ratos libres le cuesta mucho dejar a un lado el baloncesto. De hecho, justo antes de venir al programa que le estaba entrevistando, estuvo viendo un partido de su equipo. Aunque lo que nunca deja pasar es una buena cena en la calle con amigos.
A Pablo Laso no le gusta confiar demasiado los éxitos que ha tenido, sino que se fija mucho en las derrotas y en su vida personal. El técnico aseguró que está orgulloso de su vida y que siempre trata de pasar página, tanto para lo bueno como para lo malo, y que cada vez que gana un título no puede evitar pensar en lo que vendrá el año siguiente. Pero tampoco ve solo lo negativo, y cuando le viene una mala noticia también trata de pasar página lo antes posible.
En cuanto a las preguntas por su fichaje por el Madrid, confiesa que fue una decisión fácil a la vez que complicada:
“Valoraba entonces qué le podía dar yo al Real Madrid. Una oportunidad de crecer como un equipo. Conocía a mucha gente del club, también tenía una relación personal con Alberto Herreros y Alberto Angulo. Y esa temporada volvimos al Palacio, fueron muchas cosas que nos ayudaron a crecer, pero entonces no se sabía que todo iba a ir bien. Nos ha costado mucho esfuerzo y trabajo, pero creo que los madridistas lo valoran. Hay desgaste físico en estos años, tengo menos pelo, más canas y alguno kilo de más; pero me veo bien. He tenido la suerte de tener un gran grupo de trabajo a mi lado”, explicaba el técnico.
'Siento que los jugadores son como mis hijos'
Laso también quiso recordar los dos años que pasó con Obradovic cuando él aún era jugador. Recuerda que tenían un gran equipo y que la filosofía que transmitían le gustó. Les decían que cada uno de ellos era muy bueno, pero que la clave estaba en lograr ser un equipo.
Con su equipo, actualmente, no puede obligar a que los jugadores sean amigos entre ellos, ya que tiene un vestuario muy amplio con diferentes edades, religiones y nacionalidades. Pero que está satisfecho, ya que entre todos se aceptan y existe respeto por las normas y una convivencia buena. Laso comenta que los vínculos son imprescindibles, ya que aparte te ayudan a desarrollar confianza para hablar con el compañero las cosas que sean necesarias.
Muchas veces se siente con los jugadores como si fuera un padre con sus hijos. Sergio Llull, Felipe Reyes, Rudy Fernández y Jaycce Carroll han estado nueve temporadas con él y cada uno ha aportado una cosa distinta dentro del equipo, imprescindibles todas para alcanzar el éxito que han logrado.
Laso explicaba a través de una fotografía que tiene una costumbre desde que era jugador y es la de que antes de una gran cita, siempre ha de ir a cenar a un determinado restaurante cerca del Bernabéu. Para él es una superstición y considera que le da suerte.
Termina contando que para él la familia es lo más importante, pero que no siempre les hace bien, ya que su calendario es muy complicado. Pese a ello, tiene la suerte de contar con unas personas que lo entienden, aunque sea imposible tener algún fin de semana libre.