Nació en Argelia ya por los años sesenta, Wahida Djebbara tuvo una vida bastante convulsa desde pasar hambre en un país africano, pasando por llegar a Francia con su marido, viviendo momentos muy tristes lejos de sus seres queridos, algo que marcó su vida.
Las dificultades económicas de Argelia les obligaron a emprender un viaje a Francia para mudarse a Lyon una ciudad francesa en busca de nuevas oportunidades. Las cosas tampoco salieron como esperaban y vivieron durante mucho tiempo en un país que nunca los aceptó por ser africanos. Sin embargo, tuvieron nueve hijos en donde el sexto se convirtió en la estrella del Real Madrid Karim Benzema, un joven que tenía contactos con pandillas peligrosas de Lyon.
El papel fundamental de su madre en su vida
Ante este conflicto, su madre fue la encargada de iniciarlo en el mundo del fútbol. Un deporte que supuso una escapatoria a los conflictos de la calle de Karim y la verdad es que poco a poco fue creciendo en este deporte, hasta situarse las categorías inferiores del Olympique de Lyon, hasta convertirse en la estrella que es a día de hoy.
La relación que mantiene Karim Benzema con su madre es estupenda, son muy cercanos y siempre tratan de estar lo más unidos posible. El jugador ha dejado claro que es quien es a día de hoy, gracias a su madre.
Siempre intenta darle los mejores consejos a su hijo para ayudarle en este camino final. De hecho, su madre le aconsejó regresar al Olympique de Lyon para retirarse jugando en el club que tantas alegrías oportunidades le dio al inicio de su carrera como jugador profesional.