El deportista, en una de sus múltiples entrevistas, ha confesado cuál es el mayor sacrificio que tuvo que hacer por una comida que le pierde pero que por desgracia no puede comerla tanto como le gustaría.
Karim Benzema, uno de los delanteros más cotizados en el fútbol de Europa y a su vez el más controvertido, tuvo que hacer frente hace varios años a una polémica que lo implicaba en un supuesto caso de extorsión sexual a su ex compañero Valbuena, del cuál finalmente salió absuelto. Un episodio que el francés prefiere dejar atrás y centrarse en todos los proyectos que tiene en su futuro.
Aunque es difícil desabrazarse de la polémica que acompaña a Karim Benzema desde que éste desembarcarse en Madrid hace 9 años. Su exitosa carrera futbolística ha ido acompañada de titulares sobre incidentes al volante, escándalos sexuales y comentarios sobre su forma física que le han servido para forjar su relación de amor-odio con la afición madridista.
El sushi, un capricho difícil de resistir para Benzema
Sea como sea, actualmente su vida es muy diferente. El jugador reside en una colonia discreta en la carretera de Burgos, asegurando que su vida es de casa a Valdebebas y de Valdebebas a casa.
No se puede dar muchos caprichos en lo que a comida se refiere, ya que los jugadores como él siguen una estricta rutina de alimentación y ejercicios, pero en lo que si admite que peca de vez en cuando es con el sushi. El francés es un apasionado de esta comida y confiesa que de vez en cuando se da este capricho en algún restaurante de la capital.
'Dejar de comer lo que quiero es el mayor sacrificio que he hecho', reconoce.